El régimen dictatorial de Cuba abrió 35 procesos penales por supuestos delitos “oportunistas realizados de forma oportunista contra los intereses de las personas y el Estado” relacionados con el paso del huracán Irma.
Según el órgano de Trabajo Jurídico del Consejo de Defensa Nacional de Cuba entre los delitos cometidos se encuentran: la especulación y el acaparamiento, actividades económicas ilícitas y, en menor medida, robos con fuerza, hurtos y desacato a la autoridad.
“El enfrentamiento penal debe ser inmediato, ágil y en coordinación con los órganos del ministerio del Interior y los tribunales, sin menoscabo de los derechos y garantías de los ciudadanos, a fin de contribuir desde la justicia a preservar la tranquilidad del pueblo”, indicó la entidad, el pasado miércoles 13 de septiembre mediante un comunicado.
El organismo advirtió que se enfocará principalmente en los delitos que afectaron el “sistema electroenergético nacional, la producción y comercialización de alimentos, la telefonía, combustibles, y a los bienes puestos en función de resarcir las afectaciones”.
Se aplicará “una política penal de severidad ante los hechos vandálicos perpetrados por individuos inescrupulosos que se aprovechan de difíciles situaciones […] para cometer delitos”, afirmó el órgano de Trabajo Jurídico.
La entidad cubana, también aseguró que solicitará, “juicios ejemplarizantes” que serán divulgados por los medios de comunicación del país caribeño.
De acuerdo a un reporte del sitio en internet, Havana Times ladrones aprovecharon la ocasión para ejecutar un robo en un restaurante privado ubicado en la calle primera, en el municipio Plaza, La Habana.
“Uno de los trabajadores, que no podía llegar al lugar por las inundaciones, le dijo a un policía que estaban robando y la respuesta fue que él no estaba para cuidar la propiedad particular. La orden era no dejar pasar, y punto”, señaló el diario.