El presidente de Bolivia, Evo Morales, tildó al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, como una “amenaza a la paz”.
El mandatario boliviano escribió a través de su cuenta oficial de Twitter:
Luis Almagro es una amenaza a la paz de nuestros pueblos. Promueve la violencia para la intervención militar de #EEUU en Latinoamérica.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) April 5, 2017
Asimismo, Morales indicó que América Latina no necesita un organismo que fomente el odio y la división de los países.
No necesitamos organismos que fomenten el odio y división en A. Latina. #OEA como institución sumisa a #EEUU, está condenada a la extinción.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) April 5, 2017
La OEA “debería ser modelo en respetar institucionalidad. Como organismo parido por EE. UU. sigue metodología del país más golpista del continente”, continuó.
Las declaraciones del jefe de Estado se dan en el marco de la convocatoria de un grupo de países a una sesión para tratar la crisis en Venezuela, tras el golpe de Estado ejecutado por el régimen de ese país.
Anteriormente, el presidente Morales, denunció un “golpe institucional” en la OEA por “impedir el ejercicio de la presidencia de Bolivia“, funciones que asumió el pasado lunes 3 de abril.
Bolivia, había tratado de impedir que se realizara la sesión extraordinaria que tenía planificada la OEA para discutir “los recientes eventos” ocurridos en Venezuela; sin embargo, la reunión se llevó a cabo, y fue el embajador de Honduras, Leónidas Rosa Bautista, quien abrió oficialmente la reunión con la presencia de 20 países en la sala.
En dicha sesión, se aprobó “por mayoría” una declaración que afirma que en Venezuela hay una “grave alteración inconstitucional del orden democrático”, y exige al Gobierno de Nicolás Maduro que restaure “la plena autoridad” de la Asamblea Nacional, en poder de la oposición.
El texto fue aprobado “por mayoría” (17) de los 21 Estados presentes en la sala, ya que solo se abstuvieron cuatro de ellos: República Dominicana, Bahamas, Belice y El Salvador.
Fuentes: La Prensa; La Razón; Sputnik.