Medios argentinos informan que el presidente, Mauricio Macri, está preocupado por la reciente ley de la coca aprobada en Bolivia que casi duplica el área de cultivo.
La ley legaliza de forma permanente el cultivo de hasta 22.000 hectáreas de hoja de coca en el país, lo que para el mandatario argentino podría contribuir al crecimiento del narcotráfico.
De acuerdo al diario Clarín, Macri está evaluando transmitir esta inquietud a sus pares bolivianos ya que consideran que es un caso que “presiona las fronteras propias”.
Los presidentes Evo Morales y Mauricio Macri tienen planificada una reunión para mediados del próximo mes de abril en la capital argentina, Buenos Aires.
El gobierno argentino no ha sido el único que ha manifestado su preocupación ante la nueva ley de Bolivia, el gobierno estadounidense y la Unión Europea, también han manifestado su preocupación por la ley que incrementa a 20.000 hectáreas la superficie legal del cultivo.
Sin embargo, Argentina es el primer país vecino que se refiere al tema.
La nueva reforma sube la superficie legal de las plantaciones de hoja de coca de 12.000 a 22.000 hectáreas y a pesar que la nueva ley pone a Bolivia en una vía con desafíos ante la comunidad internacional, esto no parece preocuparle a Morales, quien de hecho, criticó a Estados Unidos por tratar de erradicar la planta e incluir a Bolivia en su lista de “fracasos demostrables” en la lucha antidrogas.
“La hoja de coca se ha impuesto frente al imperio norteamericano” y le ha ganado una “dura batalla”, expresó el mandatario boliviano el pasado 8 de marzo.
Fuentes: El Deber; Los tiempos.