El pasado martes 14 de marzo, la Comisión de Gobierno de la Asamblea Nacional (AN) aprobó un proyecto de ley que permitirá multar a los medios que ofendan a la mujer.
En un comunicado la Asamblea Nacional explica que “el Ministerio de Gobierno propone que se traslade a la esfera judicial, específicamente en la jurisdicción civil, la facultad de dirimir los conflictos y establecer responsabilidades ante la posible colisión de los derechos de las mujeres y de las personas con discapacidad a una vida libre de discriminación y violencia frente a los derechos de libertad de expresión, información y prensa”.
El proyecto de ley 422 modifica artículos de la Ley 82 del 24 de octubre de 2013 y de la Ley 42 de 1999 ya que establecían multas a los medios de comunicación, pero ahora no será el Ministerio de Gobierno quien se encargue de imponer las multas sino que la responsabilidad será trasladada a la esfera judicial.
La Ley 82 de 2013 indica que en caso de comprobar que un medio de comunicación incurre en publicaciones que terminen discriminado o ejerciendo algún tipo de violencia en contra de las mujeres, este podría ser sancionado por el Ministerio de Gobierno con una multa que va desde los 1.000.00 a 3.000.00 Balboas (USD $1.000 a $3.000), dependiendo de la gravedad del delito.
El pasado 4 de noviembre el Fórum de Periodistas por las Libertades de Expresión e Información, el Consejo Nacional de Periodismo y la Asociación Panameña de Radiodifusión expresaron su más profunda preocupación y rechazo por la intención del gobierno de otorgar esta responsabilidad a la llamada “Dirección para la Promoción de la Libertad de Expresión”.
“¿Qué supremo derecho tiene el comunicador?, el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones y el difundirlas, por cualquier medio de expresión”, manifestó el jurista en alusión al artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, y al agregar que los gobernantes no deben restringir el derecho de expresión por vías o medios indirectos.
Fuentes: La Prensa; TVN-2