La madrugada del pasado miércoles 8 de marzo, fuerzas policiales de Cuba asaltaron las sedes de la organización disidente Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), ubicadas en Santiago.
Dos inmuebles que funcionan como sedes de la UNPACU y tres pertenecientes a miembros del movimiento fueron objeto de la ola de allanamientos ejecutada por agentes de la policía política y brigadas de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR).
Durante los asaltos fueron detenidos ocho activistas entre los que se encuentra el coordinador nacional de la organización opositora, José Daniel Ferrer.
Otros de los arrestados arbitrariamente fueron los también activistas David Fernández, Jorge Cervantes y su esposa Gretchen, Yriade Hernández y Miraida Martín, todos de la célula “Harold Cepero”.
Carlos Oliva y su hijo Carlos Amel Oliva, fueron también detenidos en la la célula “José María Heredia”.
Según dice el opositor y expreso de conciencia Iván Hernández Carrillo, se desconoce el alcance de la redada, debido a que los teléfonos de los miembros de la organización están desconectados.
Según contó la activista Yadira Betancourt, la policía incautó desde alimentos hasta un congelador y computadoras portátiles. Se llevaron “todo lo que encontraron”, dijo.
Desde el pasado mes de diciembre, cuando la sede principal de la UNPACU fue asaltada y saqueada, la policía ha realizado 38 acciones de este tipo contra la organización.
Es importante destacar que la Unión Patriótica es la organización opositora que más reos políticos tiene en prisiones de la isla.
Tras la muerte de Hamel Santiago Más Hernández el pasado 24 de febrero en el penal Combinado del Este, que el diario Martí Noticias califica como “sospechosa”, quedan 54 disidentes de la UNPACU en prisión.
Fuentes: Martí Noticias; Cubanet.