El pasado miércoles primero de marzo, la policía de investigaciones de Chile registró las oficinas de la constructora brasileña Odebrecht en Santiago, como parte de una investigación contra el empresa por pagar sobornos para conseguir obras públicas.
El escándalo que se ha presentado en varios países de América Latina llegó también a Chile, y quién se encarga de dicha investigación es la fiscal Ximena Chong, por un aporte irregular a campañas políticas en la nación.
Según informan los medios, la policía logró confiscar documentación de las oficinas que podría ser relevante para la investigación.
Entre los documentos incautados se encuentran los registros contables que van desde 2012 a 2015 y responden a la investigación que lleva respecto a la campaña presidencial de Marco Enríquez-Ominami en 2013.
Asimismo, medios brasileños afirman que la Presidenta Michelle Bachelet también estuvo vinculada con la empresa constructora.
De acuerdo a el fiscal nacional, Jorge Abott, Chong viajará este mes a Brasilia a presenciar interrogatorios a ejecutivos de Odebrecht e indicó que:
“Esperamos que la segunda semana de marzo la fiscal pueda concurrir a Brasil a presenciar la declaración que los fiscales brasileños puedan tomar a ciertas personas que nosotros hemos solicitado se le tome respecto de hechos que pueden haber ocurrido en Chile y que eventualmente puedan ser constitutivo de delito”.
Los detalles de la compleja maquinaria corrupta salieron a la luz el pasado 21 de diciembre, luego de que el Departamento de Justicia y la Fiscalía de Estados Unidos publicara un confesión en la que los directivos de la empresa brasileña admiten haber pagado aproximadamente USD $788 millones en 11 países de América Latina y Mozambique.
Algunos de los países en que Odebrecht pagó sobornos en América Latina son: Argentina, Brasil, Colombia, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, México, Panamá, Perú y Venezuela.
Fuentes: El Comercio; El País.