
Rick Scott, gobernador de Florida, informó que buscará restringir recursos estatales a los puertos que “trabajen” con Cuba.
“Me decepciona que puertos de la Florida hayan llegado a cualquier tipo de acuerdo con la dictadura cubana”, escribió el gobernador a través de su cuenta de Twitter.
“No podemos condonar el comportamiento opresor de (el gobernante de Cuba) Raúl Castro. Hay serias preocupaciones en cuanto a seguridad y derechos humanos”, manifestó.
El gobernador republicano ha dejado en claro su posición frente a las relaciones con Cuba. El pasado mes de diciembre, el gobernador advirtió a Castro de la “histórica oportunidad” que se le presenta para conducir a la nación hacia una “nueva era de libertad” y “prosperidad sin precedentes”.
Además, Scott responsabilizó al mandatario cubano, junto a su hermano Fidel, fallecido en noviembre pasado, de “décadas de tortura y represión” del pueblo cubano y le dijo que era “evidente que en la isla no ha cambiado nada”, en momentos en que muchos “abrigan esperanzas” de un futuro mejor para Cuba.
El gobernador fue uno de los primeros en apoyar la campaña de Donald Trump y ha demostrado compartir el rechazo a los acercamientos comerciales y diplomáticos alcanzados por Obama en sus dos últimos años de Gobierno.
Scott también indicó que realizará una propuesta de recortes de impuestos por un importe total de USD $618 millones en el año 2018. La recomendación la presentará al Congreso del estado en los próximos meses.
La propuesta incluye un recorte del 25 % de los impuestos de venta en alquileres de propiedades comerciales.
Scott también propone reducciones de tres días de ventas libres de impuestos para los excombatientes o veteranos militares y la eliminación completa de los impuestos en los libros de texto universitarios.
Fuentes: Cubanet; El Nuevo Herald.