En las últimas horas de la presidencia de Barack Obama, su administración liberó en silencio una bolsa de USD $221 millones destinados a la Autoridad Nacional Palestina.
La información la dieron varios asesores del Congreso y un funcionario del Departamento de Estado a The Associated Press (AP).
Las fuentes explicaron que el envío se realizó apenas unas horas antes de que el presidente electo, Donald Trump, jurara su cargo el pasado viernes 20 de enero.
La financiación palestina podría “desatar la ira” de algunos miembros del Congreso, así como la de Donald Trump, que durante su mandato ha prometido ser un fuerte partidario de Israel, según advirtió la AP.
Inclusive, el presidente republicano ha invitado al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a visitar Washington el próximo mes de febrero.
Asimismo, Trump ha insistido en mover la embajada de Estados Unidos a la ciudad de Jerusalem, aunque esta decisión aún no ha sido tomada.
Además de los USD $221 millones para Palestina, de acuerdo a las fuentes, el Gobierno de Obama también informó al Congreso el pasado viernes que iba a enviar otros USD $6 millones por gastos para asuntos exteriores, incluidos USD $4 millones para programas de cambio climático y USD $1,25 millones para organizaciones de la ONU.