A pesar de la terrible crisis económica que vive Venezuela, el Gobierno de Nicolás Maduro eligió comprarle vacunas a Cuba sin importar que estas fueran más costosas.
Según informan medios locales, el Gobierno de Venezuela le ha comprado a Cuba, por un costo más elevado, vacunas que podían haber sido adquiridas a precios más bajos en el Fondo Rotatorio.
Según indicó la canciller Delcy Rodríguez, el Gobierno acordó ampliar los planes de cooperación con la Organización de las Naciones Unidas para adquirir fármacos a través del Fondo Estratégico y el Fondo Rotatorio. Sin embargo, esta modalidad que está a disposición de los miembros de la ONU no siempre ha sido utilizada por el Gobierno venezolano.
La Memoria y Cuenta del Ministerio de Salud del 2014 evidencia que la compra de vacunas (2.382.148 dosis de pentavalente) que realizaron a Cuba por $80.035.200 bolívares, lo que representó un costo por vacuna de USD $5,33, lo que costaba en el mismo año USD $2,5 en el Fondo Rotatorio.
El año siguiente (2015), cada pentavalente que le compró el Gobierno a Cuba costó USD $3,03, cuando el Fondo Rotatorio la ofrecía a USD $2,26; y cada BCG (tuberculosis) se pagó en USD $3,1, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) la tenía en USD $0,1.
Ese mismo año, el ministro Henry Ventura informó sobre una compra de USD $45.700.000 en 364.000 vacunas contra la tuberculosis y la hepatitis e inyectadoras, y a pesar de no haber especificado a quién le compraron los medicamentos, medios locales afirman que no fue a la OMS, ya que con esa cantidad de dinero pudieron haberse comprado 351.538.461 dosis de vacunas BCG.
“El fondo rotatorio adquiere vacunas certificadas por la OMS, son vacunas precalificadas. Las vacunas cubanas no están precalificadas, por lo que no deben tener el mismo valor que unas danesas o suizas. Deberían ser más baratas”, manifestó el exministro de Sanidad José Félix Oletta.
El mal financiamiento del Gobierno venezolano ha llevado al país a sufrir de escasez alimentaria y crisis en el sistema sanitario; actualmente la falla de medicamentos se ubica en 85 %, según indican medios locales.
“Deberíamos estar recibiendo mensualmente un número de divisas suficiente para ir aumentando la producción. El 98 % de la materia prima es importada, deberíamos también tener trámites de importación más expeditos. Si afinamos esos puntos pudiéramos hablar de una mejoría en la producción por lo menos de los productos para enfermedades crónicas dentro de unos 6 a 8 meses”, comentó el presidente de la Cámara Venezolana de la Industria Farmacéutica (Cifar), Tito López.
Fuente: El Nacional.