
El presidente panameño, Juan Carlos Varela, le dio un ultimátum a Francia para que saque a su país de una lista de paraísos fiscales antes de que termine el año, o tomará medidas diplomáticas el 2 de enero.
“El 2 de enero de 2017 me tocará tomar medidas diplomáticas que serán evaluadas en la relación con Francia”, advirtió.
“No vamos a permitir, en ninguna forma, que el nombre de nuestro país se use para cualquier tema que no represente lo mejor para el pueblo panameño”, declaró el mandatario.
Varela no aclaró cuáles serían las medidas diplomáticas, sin embargo, medios locales informaron que podría acudir a la ley de retorsión, que le permite imponer represalias a países que incluyan a Panamá en lo que califica como “listas discriminatorias”.
El presidente panameño aseguró que no permitiría que otro país se aproveche del suyo, en especial si no hay relación con el fortalecimiento del sistema financiero global. Varela se pronunció luego de recibir un informe de expertos con propuestas para mejorar la golpeada imagen de su plataforma de servicios financieros y legales.
Anteriormente, la embajada de Francia había emitido un comunicado en el que explicaba que el ministerio de Economía y Finanzas francés no realizó ninguna declaración oficial con la intención de mantener a Panamá en su lista de países no cooperadores en materia tributaria.
A pesar de eso, el mandatario de Panamá anunció que el próximo lunes 21 de noviembre publicará el informe de los expertos.
La controversia con Francia y Panamá se originó tras la filtración masiva de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca, que sacó a la luz a sociedades de papel y cuentas en el exterior de ricos y famosos, incluso jefes de Estado, en plazas calificadas como paraísos fiscales.
La creación de ese tipo de sociedades y cuentas es legal, pero se perciben como fachadas para esconder fortunas, evasión de impuestos y emplear dinero de dudosa procedencia en actividades criminales.
Fuentes: El Nuevo Herald; Diario las Américas.