La justicia de Brasil investiga el posible dueño de una mansión en Punta del Este, Uruguay, ya que podría ser parte del patrimonio oculto del expresidente Lula Da Silva y vinculado con el proceso conocido como Lava Jato.
La mansión de aproximadamente 7500 metros cuadrados, y valuada en USD$ 2.000.000 está a nombre de una compañía off-shore relacionada al también brasileño magnate del calzado Alexandre Grendene, amigo del exmandatario.
Según el artículo “La conexión Uruguay de la familia Lula” de la revista Istoé, la mansión fue comprada bajo el mismo procedimiento de un tríplex del exmandatario que se encuentra en Guarujá, en las cercanías de la megalópolis de San Pablo, un penthouse en la ciudad de San Bernardo, dos Campos y una chacra en Atibaia, en el mismo estado.
La información de la posible propiedad de Lula fue proporcionada al Ministerio Público Federal (MPF) por un conocido colaborador de la Justicia y delator de varios datos de la Operación Lava Jato, que investiga el pago de coimas a empresarios y políticos con fondos de la petrolera estatal Petrobras.
Según el informante, el caso aún se e encuentra en la “fase de recolección de pruebas” y “no se descarta pedir colaboración del gobierno uruguayo” para encontrar la verdad.
La asesoría de Lula por su parte asegura que “el expresidente no tiene ninguna casa o cuenta en el exterior, y que todas sus propiedades están en San Bernardo do Campo y están debidamente declaradas”.
La casa llamada Villa Regina está ubicada en la calle Timbó y es un chalé de estilo suizo, con una gran escalera de acceso a la residencia.
De acuerdo a lo publicado por la revista, en el predio de la mansión se destaca una gran área verde que circunvala toda la construcción.
Fuentes: El País; Espectador.