Giancarlo Di Martino, exalcalde de la ciudad de Maracaibo, denunció a dirigentes de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) por estar implicados en un soborno millonario.
Según las declaraciones de Di Martino, los dirigentes de Conmebol cobraron un millón de dolares para permitir que Maracaibo fuese el lugar donde se realizaría la final de la Copa América 2007.
La información fue revelada por el diario El Panorama tras una entrevista al actual cónsul de Venezuela en Milán, Di Martino.
“Fue una cena muy rápida porque yo fui al grano: ‘Yo quiero la final’. Ellos primero empezaron con planteamientos formales (derechos de televisión y seguridad, entre otros puntos) y después fueron al económico”, aseguró el exalcalde del partido de gobierno de Chávez en aquel entonces.
“Tuvimos que dar un aporte importante para poder terminar de consolidar esa final. Fue de un millón de dólares” confesó.
Los implicados en el escándalo fueron: Nicolás Leoz y Eugenio Figueredo, presidente y vicepresidente de Conmebol; así como Rafael Esquivel, presidente de la Federación Venezolana de Fútbol para la fecha, quien además enfrenta actualmente un juicio por corrupción en Nueva York.
“Fueron Figueredo y Esquivel quienes decidieron” le concedió el partido definitivo a Maracaibo, aseguró Di Martino.
“El acuerdo se cierra completamente con la presencia de Joseph Blatter”, explicó.
Según la declaración del exalcalde oficialista, la Copa América se da en Maracaibo debido al apoyo de Esquivel, pero sobre todo, por la aprobación del fallecido Hugo Chávez.
“Ese dinero fue para ellos. No sé cómo se lo repartieron. Esquivel se quedó por fuera porque el que llevaba la batuta era nuestro amigo de Uruguay (Figueredo)”, agregó el dirigente político.
“Hicimos felices a mucha gente. Hicimos historia y yo no iba a permitir que nos quitaran la final”, justificó Di Martino.”Por tener la final, cualquier cosa, y si teníamos que hablar con el diablo, íbamos a hablar con el diablo”.
Fuentes: El espectador; El Nacional