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El pasado miércoles cinco de octubre la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia y seis asociaciones departamentales, publicaron un comunicado en el que denuncian amedrantamiento gubernamental contra los periodistas.
La Asociación Nacional y las asociaciones de La Paz, Beni, Cochabamba, Potosí, Santa Cruz y Tarija, se declararon en “estado de emergencia” ante la producción de un “documental”, denominado “Cartel de la mentira”.
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El cartel de la mentira acusa a medios de comunicación y a las fuerzas de derecha de montar una “relación incestuosa” cuyos fines eran gestar un “golpe mediático y político”.
El fin de la producción es el de “lanzar acusaciones y agravios contra periodistas de larga y reconocida trayectoria”, así lo denuncian en el documento.
Asimismo, el texto añade que “sorprende el uso de recursos públicos para que Andrés Salari, periodista argentino, retrate la realidad del periodismo boliviano con la intención de justificar las acusaciones difamatorias con las que el gobierno ha enfrentado de manera continúa a la prensa boliviana”.
“Alertamos a la opinión pública sobre la insistente y creciente ofensiva emprendida por el Gobierno en contra del ejercicio periodístico en el país y hacemos un llamado a las autoridades gubernamentales a detener la realización del citado documental para cesar la agresión y desprestigio contra el sector” se lee en el comunicado.
Distintos periodistas fueron contactados para participar en el documental y ser entrevistados por Salari, quien trabaja en el canal oficialista Abya Yala; sin embargo, rechazó señalar el costo del documental y sus objetivos.
La Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz anunciaron el pasado lunes el estado de emergencia y exhortaron a mantenerse alerta ante las protestas que convocarán.
“Declarar en estado de emergencia en todos los sindicatos afiliados a la Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz, y mantenerse alertas a las movilizaciones que se convocarán de acuerdo a los que disponga la Confederación Nacional de la Prensa”.
El comunicado también advierte el peligro que corre la libertad de expresión en el país, al no tener estabilidad laboral garantizada.
Asimismo, añade que los periodistas están viviendo días de temor por ser despedidos en cualquier momento “por no informar lo que quiere el patrón”.
Fuentes: Noticias Fides; Eju!
