
Mujeres trancaron calles en el sector Guanape, parroquia La Guaira, como método de protesta por la escasez alimentaria que se vive en Venezuela.
La tranca compuesta por más de 300 familias de la zona reclamaron la falta de productos básicos en las bolsas de consolidación de los Comités Locales de Abastecimiento y Distribución (CLAP) creadas por el gobierno venezolano para abastecer los hogares de comida.
Las mujeres manifestantes expresaron descontento porque el contenido de las bolsas del pasado domingo, sólo traían tres harinas, una sardina, una salsa de tomate y una bolsa de detergente, por lo que sintieron la necesidad de protestar por la falta de leche, pasta, azúcar y arroz, entre otros productos necesarios.
En la tranca se escuchaban consignas como “queremos comida con el CLAP me siento mendiga”.
El jefe Civil de la parroquia La Guaira, Rolando González, le informó a los manifestantes que para bolsas que entrega la Gobernación no hay suficientes productos porque se aportaron a la Productora y Distribuidora de Alimentos S.A (Pdval) y Mercal (un programa creado por el gobierno que comercializa productos alimenticios).
Sin embargo, los vecinos no se conformaron con las explicaciones dadas por González y decidieron seguir protestando.
Las manifestantes también denunciaron que existe discriminación en la entrega de productos alimenticios; según ellos, hay sectores a los que llegan más productos que a otros por lo que algunos decidieron participar en una asamblea para buscar la mejora de la distribución de productos.
La tranca congestionó el estado en ambas direcciones, lo que ocasionó que un sargento vestido de civil , se presentara para aliviar la situación mediando con los manifestantes, pero un Policía municipal lo agredió y acusó de incitar a los manifestantes.
Los vecinos protestantes, ante la situación y la agresión del policía, decidieron lanzar piedras a los funcionarios, obligándolos a abandonar el lugar.
Esta no es la primera vez que mujeres venezolanas toman acciones desesperadas tras la falta de alimentos que vive el país y la necesidad de alimentar a los más pequeños de la casa.
Ante la desesperación, el pasado mes de julio, al menos quinientas mujeres venezolanas se vieron en la necesidad
de romper una barrera humana impuesta por la Guardia Nacional entre Venezuela y Colombia para lograr cruzar la frontera y llegar a Cúcuta en busca de alimentos.
A pesar del cierre que tenía la frontera con Colombia la cual fue implementada por órdenes de Nicolás Maduro en agosto de 2015, las mujeres venezolanas lograron empujar a los efectivos de la Guardia Nacional en la frontera, para poder adquirir productos que no encuentran en su país.
Fuente: El Nacional