El candidato republicano a la Presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump, se reunió el pasado martes 27 de septiembre en Miami a puerta cerrada con dirigentes hispanos, entre protestas de decenas de activistas hispanos, sindicalistas y estudiantes.
Luego del primer debate con su rival demócrata Hillary Clinton, Trump se reunió en La Pequeña Habana, con la comunidad hispana en el Koubek Center, dependiente del Miami Dade College (MDC).
Anteriormente, Tomás Kennedy, directivo del Sindicato de Empleados de Servicios (SEU), manifestó que le harían saber a Trump que no era bienvenido.
“Vamos a hacer saber a Trump que no es bienvenido en esta comunidad, que los latinos nos sentimos insultados por él, que los inmigrantes contribuimos a este país” dijo Kennedy.
Sin embargo, a pesar de esto, y de las protesta de los alrededores, la reunión se dio con normalidad y Trump aseguró que les “fue muy bien” en el debate.
“Fue una noche interesante, eso es seguro, y de las grandes ligas. Definitivamente de las grandes ligas”, asegurando que había derrotado a Clinton según encuestas dijo Trump.
A pesar de esto, las encuestas lo muestran por debajo de Clinton entre los hispanos, a nivel nacional.
Una encuesta realizada por la Florida Atlantic University (FAU) y publicada la semana pasada, refleja que Clinton mantiene una ventaja sobre Trump entre los votantes latinos “similar” a la que Barack Obama tuvo en las elecciones de 2012 frente al republicano Mitt Romney.
El equipo de campaña de Trump había programado en dos ocasiones reuniones a pequeña escala con hispanos en Miami, pero los dos eventos previstos fueron cancelados.
El público conformado por aproximadamente 150 personas en el Koubek Memorial Center del Miami Dade College pareció contagiarse de la energía del candidato, luego de que Trump asegurara que “haría un acercamiento con Cuba, pero con un matiz distinto”.
Por otro lado la candidata demócrata Hillary Cliton tiene previsto visitar Miami el próximo viernes 30 de septiembre.
Fuentes: El Nuevo Herald; Diario de Cuba.