Camilo Romero, el gobernador del departamento de Nariño, aseguró en entrevista con el diario El Tiempo que la situación en el municipio de Tumaco tiene en alerta a las autoridades por el aumento de cultivos ilícitos que hay en esa región, que puede desencadenar en la presencia y fortalecimiento de grupos armados.
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Romero dice que desde febrero le viene expresando su preocupación al Gobierno y dice que apoya los acuerdos de paz, pero que para lograr este fin en su departamento es necesario prestarle atención al narcotráfico y a la minería ilegal, ya que en algunos casos son los mismos campesinos los que han llegado a retener policías que quieren realizar labores de erradicación.
Además, recordó que según la ONU, en el departamento de Nariño ya hay 29.000 hectáreas de coca,de las cuales 16.900 están en el municipio de Tumaco, hecho que le preocupa bastante, y a pesar de que asegura que hay dos estrategias para disminuir los cultivos, estas no están avanzando al ritmo requerido. Una de ellas es la sustitución voluntaria de cultivos a cambio de beneficios y la otra es la erradicación que ha generado confrontaciones, porque hay familias humildes que viven de este negocio y es su único ingreso.
En Tumaco hasta el momento se han presentado varios bloqueos de vías protagonizados por pequeños productores de coca que se oponen a la erradicación, porque de llevarse a cabo no tienen otra manera de sobrevivir. Sin embargo, Romero reconoce que con la ayuda del Gobierno Nacional se han podido superar estos problemas, pero denuncia que hay otras zonas del país donde la situación se vuelve cada vez más compleja.
El gobernador de Nariño asegura que el problema ya sobrepasa la capacidad del gobierno municipal y departamental, por lo que considera necesaria una intervención del Gobierno, que aunque ha hecho más presencia gracias a su gestión, necesita de prácticas más integrales para evitar que el conflicto se siga expandiendo gracias al narcotráfico y la minería ilegal.
Fuente: El Tiempo