
Una de las principales obras de infraestructura de Bogotá es el “deprimido de la 94”. Se trata de un tunel subterráneo que busca descongestionar la carrera novena, una de las principales vías de Bogotá que se conecta con la Avenida Norte Quito Sur, que atraviesa a toda la capital colombiana.
El contrato para esta vía fue adjudicado durante la administración de Samuel Moreno y tuvo varios retrasos en su construcción y estuvo envuelto en el famoso carrusel de la contratación, que consistía en millonarios contratos de construcción que eran adjudicados a contratistas y estos a su vez hacían pagos a los gobernantes para que así fuera.
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De igual forma pasó la Alcaldía de Gustavo Petro, en donde según él, le quitaron los contratos a los contratistas corruptos, hicieron un rediseño y terminaron el 75 % del deprimido. También aseguró que habían desarrolllado lo más difícil que era lograr la tubería de agua potable, algo que no cuadra con la versión que dio el Distrito de Bogotá a comienzos de 2016.
Lo mas costoso y difícil del deprimido de la 94: poner tuberia del agua potable de Tibitó. Se logró en diciembre del 2015 pic.twitter.com/kr6y55VDY0
— Gustavo Petro (@petrogustavo) March 22, 2017
En ese entonces, se hicieron varios cortes de agua en la calle 94 y sus alrededores para poder conectar las tuberías. En ese momento Carolina Barbanti, directora del IDU del 2016, aseguró que “Tuvimos que construir un desvío de las redes por el costado oriental que pasa por debajo de la obra” según declaraciones publicadas por El Tiempo, lo que quiere decir que la tubería efectivamente ya estaba puesta pero no instalada.
Lo único cierto es que Enrique Peñalosa hizo hoy la inauguración de una obra que tuvo un costo total de $166.000 millones (USD 56,77 millones), que equivalen a cuatro veces su valor inicial y que durante ocho años perjudicó a muchos ciudadanos que vieron afectados sus negocios o la posibilidad de llegar a sus hogares por las obras.
Por este motivo, el alcalde le pidió una disculpa a todos los ciudadanos. “A nombre de la Alcaldía, pido disculpas a los ciudadanos por las dificultades, los sobrecostos, las incomodidades y los retrasos del deprimido de la 94” dijo el el alcalde según declaraciones publicadas por el diario El Espectador.
Seguramente esta obra mejorará la movilidad del sector y de gran parte de Bogotá por tratarse de una vía principal, lo único cierto es que hay un sabor agridulce entre los habitantes de la capital colombiana, ya que muchos sienten alegría de ver que la obra por fin finalizó, pero también tuvieron que ver cómo se despilfarraron los recursos públicos en ella. A esta hora ya circulan los carros por el deprimido.

Fuente: El Tiempo, El Espectador