El vicepresidente Germán Vargas Lleras se despidió formalmente de su cargo como vicepresidente de Colombia. Sin embargo, dice que aún no tiene decidido si va aspirar o no a la Presidencia de la República, hecho que pocos le creen, ya que para nadie es un secreto que siempre ha buscado ser el mandatario de los colombianos.
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El anuncio oficial de su intención de dejar el cargo se dio en la noche de este 14 de marzo en las instalación del Centro de Ferias de Bogotá (Corferias) al que asistieron varios ministros, miembros del Gobierno y reconocidos políticos del país para escuchar el extenso discurso con el que el vicepresidente anunciaba que dejaba el cargo para no inhabilitarse en el caso de una posible candidatura presidencial.
Durante su discurso resaltó todas obras de infraestructura, que no son pocas, realizadas bajo su mando, misión que le fue encargada por el presidente Juan Manuel Santos primero como ministro de vivienda y posteriormente como vicepresidente, hecho que ha sido fuertemente criticado por sus opositores ya que dicen que está “pavimentando” su candidatura.
Además, el vicepresidente le entregó un casco blanco al presidente Santos, símbolo de todas las obras inauguradas por él y a su vez, el presidente condecoró a Vargas Lleras con la Cruz de Boyacá, máximo reconocimiento que puede recibir un colombiano por alguna labor realizada en beneficio del país.
Las diferencias de las que se ha hablado en Colombia entre Vargas Lleras y Santos parecieron no existir después del evento de anoche, en el que el vicepresidente le solicitó al Congreso que de manera rápida revisen su renuncia y la aprueben para poder dejar el cargo que tiene y eventualmente aspirar a la Presidencia de Colombia.
Hasta el momento no se sabe si Germán Vargas Lleras vaya a aspirar al Presidencia con el aval de su partido o por firmas, ya que la imagen de Cambio Radical, colectividad a la que pertenece, no es la mejor debido a varios políticos condenados, incluso por asesinato.
Lo único cierto es que nadie tiene dudas sobre si Germán Vargas será o no candidato, todos lo dan como un hecho, pero su imagen está un poco caída por los escándalos de corrupción y por haber agredido físicamente a uno de sus escoltas, hecho por el que se disculpó. Ahora el segundo al mando en el ejecutivo colombiano será el general (r) Óscar Naranjo.
Fuente: El Espectador