El “pacto” histórico de Gustavo Petro –que apunta a un régimen hegemónico– se consolidó este miércoles con la capitulación de casi todos los partidos colombianos ante su gobierno que se inicia el 7 de agosto. Las organizaciones políticas que durante la campaña advertían sobre el peligro de una presidencia del exguerrillero del M-19 y ahora dejaron a un lado sus principios e ideologías para sumarse al nuevo oficialismo prácticamente entregaron el país a la aplanadora petrista. Pero los acuerdos no fueron solo de palabra. Mientras se instalaba el nuevo Congreso se conoció un documento firmado por estas colectividades en el que se comprometen a apoyar la agenda legislativa del mandatario izquierdista a cambio de cargos previamente repartidos.
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Los análisis posteriores a las elecciones legislativas del pasado 13 de marzo se cayeron. Las cuentas terminaron arrojando un resultado insólito. A pesar de que el Pacto Histórico de Petro y sus aliados naturales de izquierda y centroizquierda (Partido Comunes y la Coalición Alianza Verde y Centro Esperanza) no alcanzaban la mayoría en ninguna de las dos cámaras, luego de la elección presidencial se comenzaron a concretar acuerdos inesperados que de no ser por la oposición en la que se declaró el Centro Democrático casi convierten al nuevo Congreso colombiano en un régimen de bancada única, similar al parlamento chavista venezolano o la sandinista Asamblea Nacional nicaragüense.
El Partido Liberal, que en primera vuelta apoyó al candidato de centroderecha Federico Gutiérrez, fue el primero en saltar a la extrema izquierda sin rubor ni disimulo. La capacidad de asombro se perdió cuando organizaciones que forman parte del gobierno de Iván Duque y se suponían de centroderecha como el Partido Conservador, Cambio Radical, Partido de la U y Mira también se pusieron a los pies del nuevo mandatario, cuya ideología se ubica en el otro extremo del espectro político.
Partidos colombianos arrodillados al gobierno de Petro
Durante la instalación del nuevo Congreso colombiano este miércoles 20 de julio, se pudo conocer que la mayoría de los partidos políticos se arrodillaron ante el nuevo gobierno izquierdista y firmaron su capitulación, entendido este término según la RAE como “un convenio que estipula una rendición”. Y eso fue lo que ocurrió. RCN y La FM tuvieron acceso al documento firmado por los partidos antes mencionados con el cual quedan prácticamente “empeñados” al gobierno de Petro, pues allí se comprometen a apoyar la agenda legislativa del Pacto Histórico y las reformas que proponga el Ejecutivo dirigido por Gustavo Petro y Francia Márquez.
“Los partidos de gobierno, abajo firmantes, acompañarán la agenda legislativa del gobierno del presidente Petro y sus prioridades compartidas con todos en esta mesa de trabajo, que son: la reforma tributaria, la reforma rural integral, la reforma política anticorrupción, los ajustes normativos para garantizar la paz plena, el Ministerio de Paz, Seguridad y Convivencia, el Ministerio de la Igualdad”, señala el documento en el que se precisa que en el segundo periodo legislativo “se radicarán la reforma a la salud, a la educación, laboral y pensional”.
#Noticia | Las reformas de salud, pensional, laboral y de educación se tramitarán en el segundo periodo legislativo. Este es el documento conocido por @NoticiasRCN con las firmas de los compromisarios. Tributaria, agraria y política se radicarán este 7 de agosto. pic.twitter.com/jdDUpn9N49
— Noticias RCN (@NoticiasRCN) July 19, 2022
Además del Pacto Histórico y sus aliados el Partido Comunes (antes FARC) y la Coalición Alianza Verde y Centro Esperanza, también firmaron el documento el Partido Liberal, Cambio Radical, Partido Conservador, Partido de la U y Mira.
El reparto de la “mermelada” en el nuevo Congreso
Pero como era de esperarse, este acuerdo no se habría conseguido sin pedir nada a cambio. Lo que popularmente en Colombia se conoce como “mermelada” también se estableció en este documento. Se trata de una repartición de cargos que recuerda el pacto firmado en 2015 en Venezuela entre los partidos de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) para rotarse la presidencia de la Asamblea Nacional y las mesas directivas en las comisiones.
Así, el senador Roy Barreras, quien asumió este miércoles como presidente de la Cámara alta, cumple con lo acordado de dejar el primer año la presidencia del Senado al Pacto Histórico. El segundo año le corresponderá a la Coalición Alianza Verde y Centro Esperanza, el tercer año cobrará su parte el Partido Conservador y el cuarto año hará lo propio el Partido Liberal. La presidencia de la Cámara de Representantes también queda inicialmente en manos del Pacto Histórico con David Racero. El segundo año pasa al frente el Partido Liberal, el tercer año la Coalición Alianza Verde y Centro Esperanza y en el cuarto año entra en escena a cobrar su parte del acuerdo el partido Cambio Radical.
“Lo que vamos a enfrentar es una aplanadora política en el Congreso de Colombia”, dijo recientemente a PanAm Post el saliente representante a la Cámara por el Centro Democrático, Gabriel Vallejo, a propósitos de los acuerdos de la mayoría de los partidos con la bancada petrista, ante lo cual agregó que “la política colombiana prácticamente se prostituyó”.
Centro Democrático, único partido de oposición
De esta manera, el Centro Democrático será el único partido que hará contrapeso al gobierno de Gustavo Petro, tras haber oficializado horas antes de la instalación del nuevo Congreso que se declara oficialmente en oposición, contrario a lo que hicieron el resto de las organizaciones políticas, que decidieron sumarse a la aplanadora petrista a cambio de algún cargo, considerando que Roy Barreras había advertido que quien no se declarara como partido de gobierno “no podría aspirar a tener dignidades”.
En teoría, los partidos políticos colombianos tiene hasta el 7 de septiembre como fecha límite para confirmar su postura como oposición, independientes o de gobierno. El documento que se conoció este miércoles muestra que los acuerdos ya fueron cerrados. Y en este escenario poco importa que el recién instalado Congreso tenga un 61 % de legisladores nuevos o que de las 108 curules del Senado, 20 correspondan al Pacto Histórico, 15 al Partido Conservador, 14 al Partido Liberal, 13 a la Coalición Alianza Verde y Centro Esperanza, 13 al Centro Democrático, 11 a Cambio Radical y 10 al Partido de la U. En lo que respecta a la Cámara de Representantes, los 165 escaños están ocupados en su mayoría por el Partido Liberal con 32, el Pacto Histórico con 27, el Partido Conservador con 25, el Centro Democrático con 16, Cambio Radical con 16, el Partido de la U con 15 y la Coalición Alianza Verde y Centro Esperanza con 11. En todas estas cuentas, solo la colectividad política fundada por el expresidente Álvaro Uribe garantizará el equilibrio democrático.