
¿La arepa es colombiana o venezolana? El debate en torno a esta pregunta es tan antiguo como la existencia de ambas naciones. A lo largo de la historia han ocurrido eventos relevantes para la eventual resolución de esta polémica gastronómica que han permitido tanto a colombianos como a venezolanos adjudicarse el título. El más reciente capítulo viene con el sello de Disney. Y es que en la película animada Encanto, ambientada en las montañas de Colombia, se muestra a los personajes comiendo la tradicional arepa, lo que encendió nuevamente la controversia.
Para privilegio del país agasajado, la cinta se estrenó este miércoles 24 de noviembre en los cines colombianos, mientras que al resto de Latinoamerica llega hoy jueves 25. Como era de esperarse, fue tendencia en Colombia en redes sociales como Twitter, pero muchos pasaron por alto la trama que gira en torno a los poderes mágicos de los miembros de la familia Madrigal y se enfocaron en un detalle: el popular alimento que come la protagonista.
“Tú sanaste mi herida con una arepita con queso”, dice Maribel a su mamá, la más joven de las tres hermanas Madrigal y la única sin un don mágico. Esta referencia a la arepa en una película de Walt Disney Pictures inspirada en el realismo mágico de Gabriel García Márquez que transcurre en Colombia y resalta elementos típicos como el sombrero vueltiao y las mochilas wayúu fue suficiente argumento para que el público colombiano alimentara su nacionalismo y se atreviera a dar por cerrada la disputa con el vecino país. “Hasta Disney dice que la arepa es colombiana”, sentenciaron algunos.
Hasta Disney dice que la arepa es colombiana. https://t.co/I4ZSi5hfCC
— Dan Gamboa Bohórquez ★ (@DanGamboaB) July 9, 2021
Al sentirse directamente aludido, el público venezolano no tardó en reaccionar. Sobre todo al ver un programa en el que se pone a prueba “¿Cuál estrella de Disney hace las mejores arepas?”. Las actrices Diane Guerrero y Stephanie Beatriz, que hacen las voces de dos de los principales personajes de Encanto, preparan arepas colombianas pero amasando la harina sin siquiera tocarla con las manos, lo que aprovechó la audiencia venezolana para poner en evidencia el desconocimiento de Disney sobre el popular alimento que se disputan ambos países.
Después discutimos de quién es la arepa (venezolana claro) pero ¿qué forma de prepararla es esta?Realmente esto es un insulto a la cultura gastronómica de Venezuela y Colombia que imagino que tampoco hacen la arepa así (realmente ni idea) @Disney y @tasty deberían disculparse https://t.co/FXc5XSq8Iy
— 🌟Yei Yei🌟 (@YKLBella) November 24, 2021
Las batallas por la industrialización y el Récord Guinness
¿Por qué del otro lado de la frontera se afirma que la arepa es venezolana? Porque fue el ingeniero venezolano Luis Caballero Mejías quien registró en 1954 bajo la patente 5176 la harina de maíz precocida con la que hoy se prepara la popular arepa. Ante la imposibilidad de seguir con su proyecto por problemas de salud, Mejías vendió la patente al empresario Lorenzo Mendoza Fleury, dueño de Empresas Polar –el mayor conglomerado de alimentos de Venezuela– que en 1960 presentó al mercado la marca que seis décadas después sigue siendo líder en la preparación de arepas en cualquier rincón del mundo: la popular Harina P.A.N. De esta manera Venezuela logró industrializar, comercializar y hacer extensivo el consumo de la arepa, dejando atrás el engorroso procedimiento que incluía el uso de un pilón y un molino manual para la obtención de la masa.
En esta guerra gastronómica, además de luchar batallas en el campo de la industrialización y popularidad, Colombia y Venezuela también han competido por hacer la arepa más grande del mundo. Empresas Polar consiguió en 2011 el Récord Guinness para Venezuela al hacer una arepa de seis metros de diámetro. Tres años después Colombia superó la hazaña con una de siete metros y cuatro centímetros esperando aún su ingreso al libro Guinness World Records.
Dejando a un lado la pugna por el tamaño, Venezuela sacó otra carta en 2014, cuando Thrillist, un medio especializado en comidas, bebidas, viajes y moda, otorgó al país el primer lugar en la lista de mejores desayunos del mundo por su tradicional arepa.
Dos naciones hermanas sin guerras
Hablar de una guerra entre Colombia y Venezuela por el origen de la arepa puede sonar exagerado cuando lo más cercano a un conflicto bélico entre ambos países ha sido la crisis de la corbeta Caldas, un buque colombiano que ingresó sin autorización en aguas del Golfo de Venezuela en 1987 y tras un exhorto del entonces secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), João Clemente Baena, y el presidente argentino, Raúl Alfonsín, Colombia retrocedió, evitando que la situación pasara a mayores.
Lejos de enfrentarse, Colombia y Venezuela han luchado juntos, como cuando Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander unieron sus ejércitos para derrotar a las tropas realistas y conseguir la independencia de ambos territorios. La ruptura política que vino después entre ambos generales es parte de otra historia.
Entonces, la arepa colombiana y la venezolana, lejos de aniquilarse la una a la otra, conviven y se complementan con sus similitudes y sus diferencias. Asadas, fritas, horneadas, solas o rellenas, las arepas no faltan en las mesas de ambas naciones. Incluso es un alimento que en otros países tiene algunas variaciones y nombres distintos como las gorditas en México y las pupusas en El Salvador. En Costa Rica y Bolivia también se consume una tortilla hecha de harina de maíz a la que se le llama arepa, pero sin duda el monopolio lo comparten Colombia y Venezuela, y cada país cuenta con distintos tipos de arepas.
Las arepas venezolanas
En Venezuela existe una extensa variedad de clases y tipos de arepas que varían no solo según la región sino también de acuerdo con los ingredientes de preparación y el relleno. Para no hacer la lista tan larga se mencionarán solo las más populares.
Dentro de la tradicional arepa rellena que ha sido la más comercializada dentro y fuera del país aparecen nombres muy particulares que identifican el producto según el contenido que se agrega en su interior y además facilitan a los consumidores elegir lo que desean ordenar en las populares areperas, muchas de las cuales atienden las 24 horas.
Así se pueden encontrar en los menús la reina pepiada (pollo, aguacate y mayonesa), dominó (caraotas o frijol negro y queso blanco), la catira, (pollo y queso amarillo), la pelúa (carne mechada y queso amarillo), la rumbera (pernil y queso amarillo), pabellón (caraotas o frijol negro, tajadas de plátano frito y carne mechada), la sifrina (pollo, mayonesa, queso amarillo y aguacate), perico (huevos revueltos con tomate y cebolla), la llanera (carne asada, aguacate y queso guayanés) y cuando lo que se quiere es una arepa sin relleno el nombre para ordenarla es una viuda.
La variedad puede ser mucho más amplía, y dependiendo de la disposición en el restaurante, se puede elegir rellenarlas con salchicha, chorizo, camarones, pulpo, por mencionar algunas alternativas. Para los desayunos son muy comunes las arepas rellenas en casa solo con jamón y queso.
Otras arepas venezolanas son: la andina, originaria de los estados Táchira, Mérida y Trujillo, la cual se elabora con harina de trigo; la cabimera, propia de la ciudad de Cabimas, estado Zulia, que en vez de rellenarse se le agrega encima una variada cantidad de ingredientes como carne, jamón, queso, tomate y salsas, simulando un volcán; el tumbarrancho, también del estado Zulia, son arepas tostadas con una gran cantidad de ingredientes entre sus dos capas, dando la apariencia de una inmensa hamburguesa; y las arepas fritas, que no son de una región en particular, y como su nombre lo sugiere se hacen en una gran cantidad de aceite y suelen ser dulces, rellenándose por lo general con queso, y decorándose en algunos casos con un agujero en el centro.

Las arepas colombianas
A simple vista las arepas que se elaboran en territorio colombiano se diferencian de las venezolanas en el hecho de que el relleno no es la regla sino la excepción. La clasificación depende mayormente de la región y, aunque lucen más sencillas, muchas de ellas tienen ingredientes adicionales incorporados antes de su cocción.
La arepa de queso que se muestra en la película Encanto es tal vez la más común en todo el país. Se trata de una arepa que no necesita abrirse para agregarle algún relleno, dado que a la propia masa se le añade queso para que se derrita en su interior mientras se asa. Algo similar ocurre con la “arepa e’ huevo”, originaria de la costa caribeña. Esta se elabora con una mezcla de harina de maíz amarillo y blanco y se rellena previamente con huevos y queso para finalmente freírse en abundante aceite hasta que se esponje.
El departamento de Antioquia popularizó su arepa paisa, que se elabora con maíz trillado y se caracteriza por ser muy delgada, razón por la cual no lleva ningún relleno. Generalmente se consume poniéndole encima queso rallado, carne, frijoles o chorizo, aunque en muchos casos se le agrega simplemente mantequilla y sal.
Otra arepa tradicional colombiana es la boyacense, originaria del departamento de Boyacá. Tampoco suele abrirse para añadirle algún ingrediente, ya que se procura darle un sabor propio con su mezcla de harina con maíz precocido, panela, cuajada y sal para darle el toque final durante la cocción que se lleva a cabo en parrilla o en horno de barro. El resultado al paladar es una combinación de dulce y salado mientras que a la vista ofrece un aspecto mucho más artesanal.
En el departamento de Santander nace la arepa de chicharrón o arepa santandereana, que se compone de maíz pelao y cocido, chicharrón de cerdo, yuca cocida y sal, con lo que se forma una masa y se elaboran las arepas que se asan en una plancha. También está la arepa valluna, propia del departamento del Valle del Cauca, la cual contiene los mismos ingredientes que la paisa pero suele ser un poco más gruesa.
Como una entre tantas variedades, Colombia también tiene su arepa rellena, pero es solo esta la que se abre y se le agrega carne, pollo o chorizo, e incluso suele compararse con la venezolana, a la que los colombianos también acostumbran a llamar “arepa rellena”. Y para finalizar está la arepa de choclo, la cual abre otro debate, ya que Venezuela también cuenta con un producto muy parecido al que se le llama cachapa y no se considera una arepa.

El origen
En lo único que hay consenso es en su origen indígena. “Los cronistas y los datos arqueológicos nos hablan de que la arepa es un alimento que existió antes de la llegada de los conquistadores españoles a América”, afirmó a BBC Mundo Ocarina Castillo, antropóloga de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y autora del libro Los panes de esta tierra.
Otra fuente consultada por el medio británico, el libro ¡Viva la arepa! del historiador venezolano Miguel Felipe Dorta, señala que según los registros, los indígenas cumanagoto, que habitaban lo que hoy es el estado venezolano de Sucre, llamaban “erepa” al pan de maíz de forma redondeada que consumían para la llegada de los españoles, Pero también aclara que esto no constituye un fallo definitivo que le otorgue el título a Venezuela.
El antropólogo colombiano y estudioso de los alimentos originarios de América, Julián Estrada, dijo a BBC que el primer registro de la existencia de maíz en Colombia data de hace unos 3000 años, mientras que en Venezuela la estimación es de hace unos 2800 años atrás. “Lo que nos dicen estas cifras es que ocurrió casi en simultáneo”, concluye.
Más allá de la victoria en la batalla por la industrialización de la arepa que reclama Venezuela, la competencia por el título de la arepa más grande en el Récord Guinness que pide Colombia que se le reconozca o la lucha por la popularidad que disputan ambos países y que Disney llevó a la pantalla grande con un punto para los colombianos, mientras los venezolanos han puesto su bandera en los miles de restaurantes que se han abierto en los lugares más remotos producto de la masiva migración que huye de la dictadura comunista, lo cierto es que este delicioso alientos en todas sus presentaciones actuales se ha consumido por siglos de ambos lados del río De Oro, el Táchira, el Meta y el Orinoco que hoy se llaman fronteras.