El expresidente Donald Trump tiene la mirada puesta en las elecciones de 2024. Aunque su aspiración de volver a la Casa Blanca no se ha oficializado, son muchos los indicios que ha dado el líder republicano de relanzar su movimiento Make America Great Again (MAGA) para recuperar la Presidencia de Estados Unidos. En este largo camino que ya comienza a transitar, Trump busca garantizar que el mensaje llegue a sus seguidores por todos los medios que le han sido vetados. Facebook hizo este viernes un anuncio al respecto. La suspensión de su cuenta se mantendrá, pero ya no de manera indefinida sino por dos años. Bajo este nuevo escenario, Trump podría estar de vuelta en Facebook e Instagram para la campaña de las elecciones presidenciales de 2024.
La decisión anunciada por la compañía de Mark Zuckerberg cuenta a partir del 7 de enero pasado. Es decir, Donald Trump podría recuperar el acceso a sus cuentas el 7 de enero de 2023. Sin embargo, en el comunicado de la red social se aclara que dentro de dos años se evaluará nuevamente la situación para definir si es posible el reingreso, tras determinar “si continúa siendo un peligro para la seguridad pública”, según reseña la agencia EFE.
Nuevo sistema de penalizaciones a figuras públicas
El consejo asesor de Facebook había pedido desde el mes pasado a la empresa revisar la prohibición indefinida impuesta al exmandatario estadounidense. Esta instancia de la compañía, que actúa como una suerte de tribunal supremo, alegaba que el veto indefinido era una decisión “arbitraria”.
Facebook aceptó finalmente establecer un plazo de dos años para dar “un tiempo” que sirva para disuadir a Trump y a otros políticos de cometer “tales violaciones graves en el futuro”, aprovechando la coyuntura para presentar un sistema de “penalizaciones” para castigar el comportamiento de figuras públicas cuando ocurran disturbios o actos violentos. Estas sanciones van de un mes a dos años de suspensión, estrenándose con Donald Trump, a quien se le está aplicando la pena máxima.
Las big tech contra Donald Trump
La decisión de despojar a Trump de sus cuentas estando aún en el cargo representó un hecho sin precedentes que se venía gestando desde meses atrás. Las redes sociales habían comenzado a clasificar como “información engañosa” los mensajes de Donald Trump durante la campaña. Luego de la elección del 3 de noviembre la censura arreció frente a las denuncias de fraude que hizo el republicano. Y la irrupción en el Capitolio ocurrida el 6 de enero –en la que participaron seguidores de Trump– fue la excusa perfecta para el bloque total.
Twitter eliminó de forma permanente la cuenta del expresidente. Facebook e Instagram prohibieron de forma indefinida la propagación de los mensajes de Trump en ese momento. Snapchat siguió los mismos pasos. Y YouTube, propiedad de Google, aplicó la misma medida a la cuenta del líder republicano.
Frente a este escenario de censura total, Donald Trump había apostado por un espacio propio. A comienzos de mayo, el líder del movimiento MAGA lanzó su propia plataforma «From the Desk of Donald J. Trump» (Desde el despacho de Donad J. Trump), pero en menos de un mes decidió cerrarla, pues no se trataba realmente de un espacio de interacción con sus seguidores sino más bien de un blog personal en el que se publicaban sus declaraciones, pero que al parecer no llenó las expectativas.
Trump retoma este sábado el timón del Partido Republicano
Esta decisión de mantener el veto a Trump en sus cuentas de Facebook e Instagram por un lapso de dos años se produce justo un día antes de que el expresidente reaparezca como principal figura de la convención anual del Partido Republicano que se llevará a cabo este sábado en Carolina del Norte. Todo indica que se tratará del inicio de su regreso al ruedo político de cara a las elecciones de medio término de 2022.
Será sin duda el resultado de estos comicios y el peso que tenga su participación en una eventual victoria republicana lo que determinara su camino de vuelta a la Casa Blanca. De acuerdo con una reciente encuesta elaborada por la agencia Reuters y la empresa Ipsos, alrededor de 63 % de los republicanos cree que Trump debe postularse para la presidencia en 2024.
En una entrevista concedida a comienzos de mayo a la comentarista Candace Owens, Trump dijo que aguarda el momento adecuado para hacer el anuncio que sus simpatizantes están esperando. La oportunidad fue propicia para que Owens le sugiriera al exmandatario que la tomara en cuenta como la posible candidata a vicepresidente en su fórmula para 2024, a lo que Donald Trump le respondió que “sería una opción fantástica”. Sin embargo, el nombre que suena con más fuerza para acompañarlo en la nueva aventura política es el del gobernador de Florida, Ron DeSantis.