La alimentación de sus 1400 millones de habitantes parece ser el talón de Aquiles del régimen chino, que no oculta sus intenciones expansionistas en el ámbito geopolítico, tecnológico, militar e incluso espacial. Sin embargo, China depende en gran medida de la importación de rubros alimenticios como el maíz de Estados Unidos, pero las más recientes cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia (DANE) indican que Pekín también ha duplicado la compra de alimentos, bebidas, tabaco, café, té y especias al país sudamericano.
Durante los primeros dos meses de 2021, China compró a Colombia 1.622.000 dólares en alimentos, bebidas y tabaco; una cifra muy superior a la del mismo periodo de 2020, cuando la adquisición por este grupo de productos se ubicaba en 722.000 dólares. Esto equivale a un incremento de 124,5 %.
Lo mismo ocurre con el grupo de productos que incluyen café, té y especias. En este caso el aumento de la importación china desde Colombia fue de 117,2 %, al subir de 3.027.000 dólares en el periodo enero-febrero de 2020 a 6.573.000 dólares en el periodo enero-febrero de 2021.
Contracción general de las importaciones chinas
En general, China registró en este periodo una disminución de 21 % en la importación de productos desde Colombia, al caer de 583,8 millones de dólares a 461,1 millones de dólares, según cifras preliminares del DANE.
En casi todos los rubros se observan números negativos, pero curiosamente aumentan las importaciones en los grupos de productos alimenticios. También destaca un aumento de 358,6 % en la compra de perlas y piedras preciosas, de 313,6 % en materias plásticas y de 292,6 % en productos de cuero.
Dependencia del maíz de Estados Unidos
A pesar de la rivalidad por el primer puesto como economía mundial, la cual se incrementó desde marzo de 2018 con la llamada guerra comercial, China compró 2108 millones de toneladas de maíz a Estados Unidos para ser entregadas en la campaña comercial 2020/2021, según informó en enero el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés).
Esta cifra viene precedida por un lote de 3,74 millones de toneladas de suministros estadounidenses comprados previamente. Adicionalmente, China hizo acuerdos con Estados Unidos por 132.000 toneladas de soja para ser entregadas en la campaña comercial 2021/2022.
Debilidad en suelos agrícolas para el cultivo
China sigue avanzando en su plan de desplazar a Estados Unidos como la primera potencia mundial, pero a pesar de sus pasos firmes en muchos ámbitos parece tener una evidente debilidad para garantizar el abastecimiento de alimentos de su enorme población, que se ubica como la mayor del mundo. Gran parte de los suelos de este gigante país no son buenos para el cultivo, según reconoció en 2014 el Ministerio de Protección Ambiental y el Ministerio de Tierras y Recursos de China.
Según estos organismos, una quinta parte de las tierras agrícolas de China estaban contaminadas en diverso grado por desechos químicos hace seis años. Además, las peores inundaciones registradas en cinco décadas en la provincia de Sichuan el año pasado han complicado el cultivo en una importante región del país asiático.