La base que sostiene el Gobierno interino de Juan Guaidó comienza a tambalearse. Del llamado G-4 –conformado por los 4 principales partidos de oposición– Acción Democrática (AD) empieza a alejarse del interinato. Mientras el resto de las organizaciones –Primero Justicia (PJ), Voluntad Popular (VP) y Un Nuevo Tiempo (UNT) – aprobaron este sábado reformar el Estatuto de Transición, AD votó con contra, alegando que el estatuto vigente es suficiente para el ejercicio de la continuidad.
Un hilo en Twitter publicado por el partido Primero Justicia detalla los aspectos más relevantes de esta reforma. Como primer objetivo destaca la promoción tanto dentro como fuera del país de la convocatoria a “elecciones presidenciales y parlamentarias libres, justas y verificables”, algo que viene prometiendo el Gobierno interino desde su instalación en febrero de 2019.
Tal como lo anunció PanAm Post en exclusiva, la Asamblea Nacional electa en 2015 seguirá ejerciendo sus funciones a través de una Comisión Delegada después del 5 de enero de 2021, cuando se instalará la AN chavista, no reconocida por la oposición ni por gran parte de la comunidad internacional.
El texto aprobado establece que “la continuidad de la AN será por un periodo parlamentario adicional”, es decir, “hasta el 5 de enero de 2022 o hasta que haya elecciones presidenciales libres, lo que primero ocurra”.
Adicionalmente, se designa un Consejo Político en sustitución del Centro de Gobierno como el órgano colectivo de coordinación, seguimiento y evaluación de la acción de la Presidencia encargada. Entre las funciones asignadas a este consejo se encuentran la reestructuración del Gobierno interino para “hacerlo más eficiente”, así como la aplicación de mecanismos que permitan una mayor “transparencia en el manejo de fondos públicos”.
AD marca distancia
Acción Democrática aclaró en un comunicado que continúa reconociendo a Juan Guaidó como presidente interino pero discrepa en cuanto al mecanismo planteado para la prolongación del mandato de la actual Asamblea Nacional y por ende del interinato. La propuesta de AD es mantener el Parlamento en pleno con su función legislativa y contralora y no simplemente bajo la Comisión Delegada, que tiene funciones específicas.
“Cree esta fracción que es suficiente mantener la vigencia del estatuto, que con las herramientas jurídicas y políticas que dicha legislación concede a esta legítima Asamblea Nacional, se garantiza la continuidad de las funciones constitucionales de nuestros diputados y de este Parlamento”, se explica en el comunicado en el que se aclara además que debido a la ilegitimidad de las elecciones realizadas por el régimen el 6 de diciembre, el estatuto vigente satisface las expectativas funcionales de esta AN, ya que no se ha elegido constitucionalmente a quienes habrían de sustituirla.
Para @ADemocratica, nuestros diputados, dirigentes y militantes la lucha democrática, apegada a la CRBV y en beneficio del pueblo, es lo más importante. Hoy @AD_DiputadosAN salva el voto en la Reforma al Estatuto de Transición y ratifica su respaldo a la AN legítima y @jguaido pic.twitter.com/Ivoj3XnsQT
— Secretaría de Organización Nacional AD (@organizacionAD) December 26, 2020
Otra de las razones que alega Acción Democrática para votar en contra de la reforma al Estatuto de Transición y Reestructuración del Gobierno Interino tiene que ver con la creación de un Consejo Político. “Creemos innecesaria la creación de un Consejo Político para ejercer funciones que perfectamente podría realizar la Asamblea Nacional o el presidente encargado de la República”.
Otras grietas internas
Pero no solo fueron los diputados de Acción Democrática los que rompieron la unanimidad. Los parlamentarios de Primero Justicia que forman parte del sector que lidera el excandidato presidencial, Henrique Capriles, estuvieron ausentes en la votación virtual que el G-4 planteaba como clave para garantizar la continuidad.
El comisionado presidencial para las Relaciones Exteriores de Venezuela, Julio Borges, dijo mediante un mensaje en su cuenta en Twitter que lamentaba que esta reforma no se hubiera aprobado por unanimidad.
Hoy se aprobó el nuevo estatuto de la transición para continuar la lucha por la democracia en Venezuela. Trabajaremos su aplicación con la comunidad internacional, sin embargo, es muy grave que no haya sido votado unánimemente. https://t.co/MBxi5LVOlz
— Julio Borges (@JulioBorges) December 26, 2020
Incertidumbre internacional
Juan Guaidó ha contado con el respaldo de más de 60 países que reconocen como legítimo su mandato y no el de Nicolás Maduro. A partir de enero esto puede cambiar. En la Unión Europea no hay consenso para seguir reconociendo a Guaidó como presidente encargado. Países como Italia y Grecia han puesto en duda la continuidad del dirigente de Voluntad Popular. Por tal motivo, el llamado grupo de los 27 evalúa hacer un pronunciamiento en rechazo a las elecciones del 6 de diciembre pero con matices en cuanto a la figura de Guaidó como líder del país.
Otro apoyo importante que pende de un hilo es el de Estados Unidos. Bajo la administración del presidente Donald Trump, Guaidó contó con respaldo incondicional. El líder republicano había garantizado extender el reconocimiento a Guaidó más allá del 5 de enero, pero con Joe Biden en la Casa Blanca no hay nada claro. Los asesores del demócrata han adelantado que el presidente electo buscará acercamientos directos con Nicolás Maduro, lo que estaría dejando la figura de Guaidó a un lado.