EnglishOmar Mora Tosta es el abogado de los venezolanos Raúl Emilio Baduel y Alexander Tirado, los primeros manifestantes de la ola de protestas de 2014 que han sido condenados formalmente en un juicio.
Mora Tosta ofreció una entrevista a PanAm Post después que este miércoles se sentenciara a Baduel y a Tirado, de 34 y 31 años, a ocho años de prisión por los delitos de asociación e instigación a delinquir, e intimidación pública.
El defensor considera que la sentencia del caso es un mensaje represivo para los venezolanos, pero también cree que es un ataque directo para el padre de Baduel, el General Raúl Baduel, quien disintió del gobierno de Hugo Chávez y está preso desde 2009; así como para debilitar al partido de Tirado, Voluntad Popular, dirigido por Leopoldo Lopez, quien comparte cárcel con el General Baduel desde 2014.
¿Qué se encontraban realizando los acusados en el momento en que fueron detenidos?
El día 21 de marzo de 2014 por redes sociales se había convocado a una concentración cerca del complejo de ferias de Maracay, para protestar contra la celebración de las Ferias del estado Aragua, que se llevaban a cabo a pesar del luto [de las muertes de manifestantes en días previos].
La protesta consistía en realizar una cadeneta humana de todas las personas con franelas de colores de la bandera tomadas de la mano. Raúl Emilio se encontraba en un extremo de la vía con una cruz de madera que decía “no más balas”, y Alexander se encontraba en la acera con un megáfono diciéndole a las personas que no se bajaran de la acera para no trancar el tránsito.
A las seis de la tarde, funcionarios de la policía pidieron a Alexander que los acompañara en una camioneta, él entregó el megáfono y se montó con ellos. Luego, fueron directamente a donde se encontraba Raúl Emilio, y le dijeron “ahora venimos contigo Baduel”, lo arrastran y es ahí cuando intervienen tres mujeres que trataron de impedir que se lo llevaran, y ellas también resultaron detenidas.
De manera ilegal la policía hizo dos expedientes distintos, en uno puso a las mujeres y a un menor de edad que se llevaron porque estaban grabando los hechos, y en otro dejaron a Raúl Emilio y a Alexander.
La policía forjó las actuaciones y puso hechos, circunstancias y objetos completamente distintos a lo que realmente pasó
Posteriormente fueron presentados en Tribunales distintos, y al otro grupo se le otorgó medidas cautelares, mientras que a los jóvenes se los llevaron detenidos.
Lo importante allí es que la policía forjó las actuaciones y puso hechos, circunstancias y objetos completamente distintos a la realidad. Puso que habían sido detenidos a las ocho de la noche en un sitio distinto, que se encontraban haciendo una manifestación violenta, que tenían bombas molotov, palos, piedras, y que habían agredido a la policía.
Se probó que eso era completamente falso porque desde el mismo momento en que ocurrió la detención las personas presentes filmaron, y los videos y fotos se encuentran en las redes sociales.
¿Cuales son los cargos que han justificado una condena de ocho años para dos personas que se encontraban protestando?
La condena no tiene ningún tipo de soporte, ellos fueron condenados de manera absolutamente ilegal e injusta.
La prueba que se le hizo a la ropa demostró que no había rastros ni de gasolina ni de pólvora, sin embargo ese fue un elemento que ellos promovieron como parte de la acusación..
La defensa logró probar durante todo el juicio que son inocentes, inclusive con las propias pruebas de la Fiscalía. La prueba que se le hizo a la ropa demostró que no había rastros ni de gasolina ni de pólvora, sin embargo ese fue un elemento que ellos promovieron como parte de la acusación.
Los policías que fueron a declarar se contradijeron porque estaban mintiendo, y nosotros llevamos a 14 personas que estuvieron presentes el día de los hechos como los testigos, y sus declaraciones contrastan con lo que dice el expediente.
El hecho más abominable es que la juez se agarró de la excusa de que ellos no tenían permiso para ejercer esa protesta de parte de la primera autoridad del municipio. En Venezuela hay una interpretación que dio el Tribunal Supremo de Justicia, posterior a los hechos, que establece que hay que pedir permiso a la alcaldía cuando las manifestaciones atraviesan puntos de la ciudad donde entorpecen el tráfico.
El precedente terrible que ha dejado esta condena es que se está cercenando la posibilidad de disentir y de expresar.
Debido a la manera en la que se ha llevado el caso, ¿considera a Baduel y a Tirado como presos políticos?
Definitivamente. Cuando no consigues elementos de convicción para justificar una detención; cuando son separados en causas apartes; cuando te das cuenta de la actitud de disfrute que tuvo la juez al decir que eran culpables sin ningún tipo de remordimiento, estás claro que no estas trabajando correctamente [con imparcialidad].
¿Cuales son las acciones siguientes que tomarán?
El caso ya está en instancias internacionales desde el momento en que se les aplicó tortura en la cárcel de Uribana.
Evidentemente este juicio va a tener consecuencias y todos los que hayan intervenido en él para garantizar esta condena tendrán que responder a la justicia tanto nacional, como internacional.
Una vez que la juez presente el cuerpo de la decisión, en 10 días nosotros presentaremos el recurso de apelación y nos mata de curiosidad saber la motivación que ella va a dar a este fallo.
¿En qué situación se encuentran actualmente los jóvenes?
Ellos se están recuperando de la tortuosa experiencia que tuvieron en Uribana, y están muy alentados en que van a restaurar más temprano que tarde su libertad porque saben que esto no va a ser eterno, y que en algún momento regresará la Justicia a Venezuela.
Editado por Elisa Vásquez.