El respaldo del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, al líder opositor venezolano Edmundo González tiene límites. Aunque el mandatario reconoce que la acogida en Madrid representa un “gesto humanitario” está reticente a reconocerlo como presidente electo, tal como propone el Partido Popular en el Congreso. ¿Podrá mantener la posición? La presión en contra crece.
Ya la iniciativa de la tolda de Alberto Núñez Feijóo cuenta en el parlamento con los votos de PP, Vox, la Unión del Pueblo Navarro (UPN), la Coalición Canaria y el Partido Nacionalista Vasco (PNV) que juntos suman 177 diputados de los 350 que componen la Cámara Baja, suficientes para aprobar la Propuesta no de Ley (PNL) por mayoría absoluta.
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El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) se enfrenta a una situación crucial con repercusiones a nivel internacional. La abstención parece casi inviable, y será imprescindible negociar una alternativa con el resto de las bancadas.
El clima interno es dinamita, considerando que el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, quien pertenece al partido Sumar, insiste en que “la concesión de asilo no supone reconocerle como presidente, que es lo que nos propone el Partido Popular. Eso ya se hizo con Juan Guaidó y fue un fracaso. Algo reconocido incluso por los que impulsaron esa vía”.
Obligado a negociar
Ahora bien, con el partido PNV sorpresivamente a favor a la proposición del PP para el reconocimiento de González Urrutia como ganador de los comicios del 28 de julio, Sánchez está obligado a buscar un acuerdo en la bancada del PSOE frente a la iniciativa. La discusión será intensa, debido a que los socialistas hasta ahora han evitado reconocer a Nicolás Maduro y al abanderado de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
Según Es Diario, el mandatario pretende que el apoyo del PSOE a la propuesta del PP dependa de la inclusión de una enmienda, para que “la UE analice si ese reconocimiento puede ayudar a lograr una solución política negociada a la situación de aquel país”.
Además, el partido de Sánchez gestiona que el Congreso distinga “toda labor de mediación del expresidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero para permitir la liberación de presos políticos y tender puentes entre Gobierno y oposición venezolanos”. ¿Cederá el PP después de criticar la complicidad de Zapatero con Nicolás Maduro? Es poco probable.
Los populares sostienen su propuesta presentada en la Cámara Baja en que la comunidad internacional tiene la obligación política y moral de reconocer a González y ello atañe de forma directa al gobierno de España. Al respecto, argumentan que al Ejecutivo le corresponde actuar como bisagra entre Europa y la comunidad iberoamericana para garantizar la democracia y su defensa.
En la agenda de Pedro Sánchez está incluida una reunión a finales de esta semana con Edmundo González. Para el encuentro la posición del PSOE estaría demarcada. Mientras tanto, la líder partido Vente Venezuela, María Corina Machado, convocó a una concentración a los venezolanos residentes en España en la Plaza de las Cortes de Madrid, frente al Congreso, para «reivindicar» el mandato de las elecciones del 28 de julio en Venezuela.