Alarmante. Así ha sido la reacción de los mercados frente al triunfo del izquierdista Gabriel Boric en el balotaje de este domingo por la presidencia de Chile. Incertidumbre, desconfianza y una alta volatilidad financiera marcan las primeras transacciones después del resultado, augurando un panorama sombrío para el país que ya proyecta una desaceleración para 2022.
El fondo estructurado de acciones ECH compuesto por las 10 empresas más poderosas de la nación, entre ellas la Sociedad Química y Minera de Chile, Banco de Chile, Enel Américas, Falabella y Cencosud, reportó en la apertura de este lunes una caída de 7,27 %. De esta manera, el principal índice local se ubica como el primero que registra el peor desempeño diario presionado por el cambio de mando previsto para el 11 de marzo.
La industria minera también recibe con contracciones la noticia de que Boric llegará al palacio de La Moneda en menos de tres meses. Entre los fabricantes de cobre, Antofagasta mostró un recorte de 5 %, mientras que la Bolsa de Comercio de Santiago marcó pérdidas iniciales de 7,19 %, su mayor caída diaria desde la elección de los convencionales constituyentes.
Una divisa volátil
En la cadena de operaciones, el dólar registró una violenta alza de 26 pesos para cotizarse en 872,61, una cifra récord, considerando que se trata del mayor salto diario desde el 6 de noviembre de 2008, cuando el tipo de cambio subió 40 pesos tras la quiebra de la compañía de servicios financieros norteamericana Lehman Brothers que provocó la crisis subprime.
Además del aumento de la divisa estadounidense, Bloomberg revela que el peso chileno inicia la penúltima semana del año como la segunda moneda con el peor desempeño diario entre las emergentes, mientras que en el ranking mundial se ubica como la tercera.
Pero el escenario no es una sorpresa. José Raúl Godoy, jefe de análisis de XTB Latam, admite que “el triunfo de Boric era el escenario que menos gustaba al mercado por sus medidas radicales”. Por ello, es probable que veamos una depreciación del peso chileno, lo que impactaría en un alza en el tipo de cambio que podría cotizarse en torno a los 800 a 900 pesos.
Se veía venir
Esta jornada electoral levantó temores desde el principio. De hecho, el Banco Central constató un “cambio estructural” en el mercado de capitales chileno debido al retroceso de dos décadas que registran las condiciones para el acceso a un crédito hipotecario y la salida de capitales superó los 10000 millones de dólares este año, un panorama similar al de la crisis de hace 13 años que hundió al país en una fosa económica que está tatuada en la memoria y cuenta del ente.
La historia podría repetirse, considerando que el último Informe de Estabilidad Financiera (IEF), que estima los principales riesgos, vulnerabilidades y mitigadores para la estabilidad del mercado financiero, arroja que las liquidaciones forzadas de activos de inversionistas institucionales impactan los precios de activos y a ello se suma el deterioro de las finanzas públicas y un aumento de la incertidumbre.
“Todos estos factores han llevado las variaciones de las tasas de interés de mercado, el tipo de cambio y los valores bursátiles en Chile a los extremos de los movimientos internacionales y han comenzado a reflejarse en un deterioro de las condiciones financieras que afectan a los actores domésticos, como el costo de financiamiento para el Fisco, las tasas y plazos de créditos hipotecarios y la valorización de fondos previsionales”, señala el documento.
La traducción es pesimista: “Hay una economía chilena más vulnerable y con menor espacio de política económica para mitigarla porque hay una política monetaria que se encuentra en una fase de retiro del estímulo, una fuerte depreciación de la moneda, y un mercado de capitales de menor tamaño con reducida capacidad para afrontar fluctuaciones”.
Un desvío peligroso
Propiciar amplios acuerdos entre las fuerzas políticas sin socavar el crecimiento económico es el gran desafío de Boric. Un desvío de ese mandato solo hace previsible que el gobierno entre en un rápido desgaste y sienta en corto plazo la desafección ciudadana del “oasis latinoamericano”. Según datos del Banco Mundial, Chile pasó entre los años 2000 y 2015 de 36 % a 8,6 % de la población por debajo lo que se denomina línea de pobreza nacional. Esa fuerte disminución equivale a un descenso en los niveles de pobreza de cerca de 4.000.000 de habitantes.
Junto a Uruguay, que tiene 8,1 % de la población total viviendo bajo los estragos de la pobreza, son los dos países de la región que menor porcentaje presentan.
Los ejemplos de ir en sentido contrario sobran. Una mirada a Venezuela, Nicaragua, Cuba y Argentina es suficiente. Ahora, su comodín para atenuar el panorama será el nombramiento del gabinete que permitirá fijar expectativas cuando por otro lado hay un Congreso dividido y diverso que demandará arduas negociaciones en temas económico para minimizar los riesgos de volatilidad con rápidas señales de moderación real porque con una Convención Constitucional en paralelo, el mercado no le perderá pisada en 2022.
¿Preocupación por la democracia?
La Cámara Chilena Norteamericana de Comercio (AmCham Chile) emitió un comunicado en el que le recuerda a Gabriel Boric que “la democracia es uno de los valores más significativos que comparten Chile y Estados Unidos”.
[DECLARACIÓN] Felicitamos a @gabrielboric por ser Presidente electo y ofrecemos colaboración al nuevo gobierno, confiando que éste promoverá cambios positivos para toda la sociedad, con diálogo, acuerdos y fortalecimiento institucional.
➡ https://t.co/KSTRCqDVLn pic.twitter.com/aO3mJ9sidS— AmCham Chile (@AmChamChile) December 20, 2021
Sin embargo, el presidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF), José Manuel Mena, cree que la única forma de generar certidumbre y estabilidad para avanzar es una política económica consistente y perdurable en el tiempo, sólo así volverán las tasas de intereses bajas, la inflación moderada y la disminución del riesgo país.