Un enredo, una división abismal y un desorden ideológico enfrenta el candidato presidencial de la izquierda chilena, Gabriel Boric, con sus partidos aliados por el cuestionado proceso electoral de Nicaragua que eterniza al exguerrillero Daniel Ortega en el poder. Las organizaciones que lo apoyan defienden al dictador sandinista mientras él trata de desmarcarse en público de la tiranía nicaragüense.
Acuerdos no hay. Eso está demás decirlo y queda claro en el comunicado en el que el Partido Comunista, Partido Igualdad, el Movimiento del Socialismo Allendista, La Izquierda Libertaria, Ukamau Chile y el Movimiento de Pobladores en Lucha destacan el “carácter democrático” de la jornada comicial en la nación centroamericana a pesar del “conflicto de intereses donde el gobierno norteamericano es contraparte”.
Así lo ven. Sostienen que “el pueblo nicaragüense concurrió masivamente a las urnas para elegir democráticamente a sus autoridades en paz, de acuerdo con su institucionalidad y leyes vigentes” y además subrayan que “las elecciones se realizaron con la presencia de observadores y acompañantes internacionales y contaron con una masiva participación y concurrencia a las urnas”.
Se trata de una memoria selectiva, considerando que la detención de los siete precandidatos que aspiraban a gobernar Nicaragua, la designación de la sandinista Brenda Rocha como presidente del Consejo Supremo Electoral, la disolución del Partido Restauración Democrática (PRD) y el Partido Conservador (PC) y la persecución a la disidencia no son temas que figuran en la carta divulgada.
Otra versión
La postura de Boric es que tiene un “compromiso con la democracia y los derechos humanos, sin respaldos de ningún tipo a dictaduras y autocracias, moleste a quien moleste”. Desde su cuenta de Twitter asegura que “Nicaragua necesita democracia, no elecciones fraudulentas ni persecución a opositores”.
Estados Unidos, la Unión Europea, Costa Rica, Chile, Colombia, Uruguay, Ecuador e incluso Perú desconocen la farsa electoral del pasado domingo en Nicaragua, pero que Boric intente adherirse a esta postura genera suspicacias cuando el excandidato presidencial del Partido Comunista, Daniel Jadue, vocifera que le cedió entre 92 % y 95 % de su programa de gobierno y su tolda política ampara a Ortega.
"¿Cuanto del programa del Partido Comunista tiene el programa de Boric?
Daniel Jadue: 92% a 95%"Votar por Boric es votar por el Comunismo para Chile. Punto final. pic.twitter.com/1wWfIlRSVk
— Pedro (@PedroLarach) November 11, 2021
Para Yasna Provoste, candidata presidencial de la centroizquierda, el episodio de Daniel Boric es “difícil” porque “la coalición dice una cosa y sus partidos dicen otra”.
"Es difícil para Gabriel en donde su coalición dice una cosa y sus partidos dicen otra", afirmó Yasna Provoste respecto a la declaración del Partido Comunista sobre las elecciones en Nicaragua.https://t.co/1Xh7j6jW9c pic.twitter.com/BM1UfdqvAL
— MEDIABANCO Agencia (@mediabanco) November 12, 2021
“¿Gabriel Boric va a aceptar al Partido Comunista en su campaña? ¿Los cómplices de las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua?”, se pregunta el candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast, en sus redes sociales.
La Dictadura de Ortega en Nicaragua no admite ambiguedad. ¿Gabriel Boric va a aceptar al Partido Comunista en su campaña? ¿Los cómplices de las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua? pic.twitter.com/H9ZWlYoipV
— José Antonio Kast Rist 🇨🇱 (@joseantoniokast) November 12, 2021
Política exterior de conflicto
La declaración del entorno partidista de Gabriel Boric emplaza también a la Administración de Sebastián Piñera a resarcir el “nuevo error” que comete “al desconocer el proceso electoral de la República de Nicaragua realizado el 7 de noviembre” porque “un asunto es disentir de un proceso y otro es sumarse a los dictámenes del Gobierno de Estados Unidos, cuya injerencia en contra de la voluntad de los pueblos es práctica usual en el mundo entero”.
Reprochan que Piñera enrumbe las relaciones diplomáticas a una “política de agresión y sanciones unilaterales que encabeza Estados Unidos y sus aliados europeos cuando Chile es el responsable de la violación sistemática de los derechos humanos y de la permanencia de presos políticos”, según el manifiesto de los partidos de la coalición que impulsa la candidatura de Boric.
Con las elecciones en agenda para este 21 de noviembre, el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, matiza la división alegando que “la política exterior será responsabilidad de Gabriel Boric y el partido acatará, aunque se expresen diferencias”. De las palabras a los hechos, las distancias suelen ser largas y en política sinónimo de conflicto.