
Actualmente, la crisis humanitaria de Venezuela está fuera de toda duda. Según estimaciones, cerca de un 80 % del más de millón de migrantes venezolanos que está en Colombia se quedará en el país y no retornará a su lugar de origen.
Esto puede generar una alarma, pero al mismo tiempo es un desafío que ha asumido el Gobierno de Iván Duque al establecer una política exterior y de recepción de migrantes más benévola de acuerdo con las exigencias formales de ingreso al país.
Los analistas coinciden que un buen manejo de la migración venezolana que llega a Colombia puede beneficiar al producto interno bruto (PIB), pues la mayoría de estos venezolanos actúan en Colombia como ciudadanos del común, pues acceden a bienes y servicios. Hecho que podría generar un crecimiento poblacional, dado que son jóvenes y otros están altamente formados para ejercer actividades empresariales.
PanAm Post habló con Ronal Rodríguez, politólogo e integrante del Observatorio de Venezuela, sobre las implicaciones positivas de la migración en Colombia y el manejo que se le debe dar a la regularización.
“Hoy Colombia, cuenta con 1 400 000 venezolanos que consumen, desayunan, almuerzan, comen, visten, duermen y generan, se quiera o no, un mercado adicional. Obviamente, algunos de ellos lo hacen de forma muy precaria, sobre todo en un primer momento, pero muchos se van insertando en la economía, principalmente en los sectores informales”, afirmó Rodríguez.
También aclaró que el objetivo es que el Estado colombiano impulse estrategias que les permita a los migrantes insertarse “en la economía formal y así puedan tributar y contribuir al sistema de seguridad social. Si no lo hacen lo que ocurre es que ese problema se prolonga en el tiempo con ciudadanos que más adelante van a requerir en su vejez acompañamiento”.

Según Rodríguez, cerca del 80 % de los migrantes venezolanos que llegan a Colombia se quedarán en el país, y en un futuro serán nacionalizados:
Hay que tener en cuenta que en el fenómeno migratorio más del 80 % se van a quedar en Colombia y se van a convertir en ciudadanos colombianos que es eso lo que pasa con las migraciones, son muy pocos los que realmente regresan.
El politólogo también señaló que en el aspecto económico Colombia se verá beneficiado porque los migrantes venezolanos significan “un mayor consumo, ese consumo genera un mayor empleo, diversificación, ampliación de mercados”.
“Pero también dependerá de cómo se gestione la migración, porque si se les pone demasiadas trabas en lugar de sacar beneficios y, por ejemplo, transferir estos esfuerzos al Estado a través de la vía impositiva se podrá contrarrestar buena parte de los mercados que en Colombia son muy fuertes; los mercados irregulares y el contrabando”.
Añadió, que una porción de venezolanos se convirtió en los distribuidores del contrabando turco de dulces y chocolates y en el sistema de transporte Transmilenio en la ciudad de Bogotá. “Eso no deja de ser un efecto que no es deseable en la medida que todo esto se queda sin tributación y termina alimentando mafias que están estrechamente vinculadas con actores al margen de la ley, que generan espacios de violencia muy fuertes”, puntualizó.