Más de 500 niños se encuentran lisiados de manera permanente y hoy sufren de pérdidas visuales, mutilaciones de extremidades por los cuales las FARC no han rendido ningún dato ante la JEP y están bajo una absoluta impunidad, denunció el periodista Herbin Hoyos, quien dirige el programa Voces del Secuestro, de acuerdo con datos entregados por desmovilizados de la extinta guerrilla de las FARC.
Hoyos está en una cruzada para recaudar las denuncias basadas en testimonio de todos los padres de los miles de menores reclutados, de manera de montar el caso ante la Corte Penal Internacional (CPI).
Como consecuencia de la desmovilización y liberación de menores llevada a cabo en el marco del proceso de paz, 135 niños que quedaban en las filas de las FARC volvieron a sus hogares entre septiembre de 2016 y agosto de 2017. Esto llevó a que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 2018, sacara a este grupo guerrillero de su “lista negra” de organizaciones que violan los derechos de los niños en conflictos.
Los reclutamientos de menores y las violaciones sexuales, los crímenes que irán a la CPI. https://t.co/xNc3BwADZg
— Herbin Hoyos Medina (@herbinhoyos) May 9, 2019
Sin embargo, ahora esta situación ahora se repite gracias a la presencia de grupos guerrilleros disidentes en las zonas que fueron liberadas.
“Con los frentes que reemplazaron al bloque sur de las Farc en la zona del Caquetá y parte del Putumayo, la cifra de reclutamiento (de menores) asciende a 62 casos. En el Cauca, influencia del ELN y de las Farc activas, van 28, y en la zona del Catatumbo, con ‘Los Pelusos’ y el ‘Clan del Golfo’, entre otros grupos al margen de la ley, el dato supera los 60 casos, y estos hechos no han sido denunciados”, aseguró Hoyos.
Mientras que durante la audiencia pública celebrada en el Congreso la semana pasada en Bogotá sobre reclutamiento forzado en menores, el partido Centro Democrático advirtió que en el último año cerca de 15 mil niños han sido víctimas de este delito según datos de la Defensoría del Pueblo.
La denuncia realizada por los integrantes del partido del Gobierno colombiano apunta a que el secuestro y el desplazamiento forzado sigue sumando niños para expandir sus filas en frontera y regiones que aún continúan en guerra luego de la firma del acuerdo de paz.
La denuncia la hizo la representante a la Cámara, Margarita Restrepo, quien manifestó que muchos de los victimarios de este crimen siguen recibiendo beneficios según lo acordado en el acuerdo. “No puede ser que hoy están en el Congreso sin haber pagado un solo día de cárcel”, señaló al estatus jurídico que gozan los congresistas del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC).
De igual modo, el Gobierno ha denunciado que las disidencias de las FARC y el ELN siguen reclutando y adoctrinando a personas y niños. Precisamente, en el municipio de Hacarí, Norte de Santander, el Ejército capturó a un pedófilo identificado como Geyner Guerrero Galván, que operaba en Colombia, Venezuela, México y Argentina, y que además es señalado de facilitar menores a grupos armados para su reclusión.
Guerrero usaba enlaces de comunicación para vincular a los niños a las filas de la disidencia del frente 33 de las FARC y también a las del ELN, que delinquen en la región del Catatumbo.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha informado que luego de la firma de la paz con las FARC, se registró un claro deterioro de la situación en la costa Pacífica y en amplias zonas del oriente y sur del país, donde proliferan los constantes abusos hacia la población civil por parte de todos los actores armados. Entre las zonas que representan mayor riesgo está la frontera colombo-venezolana, a raíz de las condiciones de vulnerabilidad de los migrantes.
Según el Instituto colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), se recibió cerca de 6499 niños, niñas y adolescentes provenientes de grupos armados. Entre ellos 5278 pertenecían a las FARC, 327 al Ejército de Liberación Nacional (ELN) y otros 894 niños provenientes de otros grupos ilegales.