La Corte Constitucional declaró inconstitucional una sentencia de 2017 en la que se prohibía las actividades taurinas y las corridas de toros al calificarlas como maltrato animal.
Esta decisión habilita a partir de mayo de 2019 las corridas de toros en el país.
El alto tribunal explicó que la sentencia no tenía en cuenta la linea jurisprudencia que había decantado. En una decisión anterior de 2010 se advertía que las corridas de toros eran una expresión del arraigo cultural del país y que en ninguna región del país era posible prohibir este tipo de expresiones.
Cabe aclarar que la sentencia de 2017 prohibía la tauromaquia, las peleas de gallos, las novilladas y la becerradas. La justificación de los magistrados se basó en la tesis que los animales son seres sintientes, y que por ese motivo, no era constitucional llevar a cabo recreaciones que dieran como resultado el maltrato de los animales.
De manera que volverán las corridas de toros, aunque con ciertos matices. La Corte aclara que en aquellos municipios donde sea considerado como una práctica tradicional se llevará a cabo, sin embargo, en aquellos lugares donde nunca se haya celebrado no se realizará. Asimismo, establece que las autoridades municipales “en ningún caso podrán destinar dinero público a la construcción de instalaciones para la realización exclusiva de estas actividades”.
El argumento libertario sobre la prohibición de las corridas de toros
PanAm Post habló con el abogado Daniel A. Monroy experto en análisis económico del derecho, quien señaló que más allá de objetar el cambio de jurisprudencia de la Corte Constitucional, conviene hablar de lo que el libertario piensa sobre los animales, y más concretamente, el maltrato animal.
“Algunos piensan que restringir las corridas es atentar contra la libertad de quienes disfrutan ese espectáculo. Que estemos en desacuerdo con lo que piensa o disfruta una minoría no justifica que la mayoría pueda restringir lo que la minoría piensa o disfruta hacer. Este argumento es muy débil en tanto que supone que el maltrato al animal es algo moralmente irrelevante”.
El experto señala entonces que existe una contradicción entre ser ‘libertario’ y objetar que otros traten cruelmente a los animales.
El filósofo Robert Nozick en ‘Anarquía, Estado y Utopía’ hace una defensa libertarista del no trato cruel a animales (incluye cuando no hay crueldad, pero el argumento es mucho más complejo). El punto es que la decisión de actuar ‘libremente’ lleva consigo la ‘restricción de no agresión’. Este es el principio libertario.
La agresión significa acá producir consecuencias en otros y que esas consecuencias sean ‘moralmente indeseables’.
Dice Nozick, “si una persona chasquea los dedos (de lo cual deriva placer), pero ello produce que 10 mil vacas mueran con gran dolor y sufrimiento, podemos estar completamente seguros que acá ¿No hay ninguna razón que haga moralmente malo las consecuencias de chasquear los dedos? Si la respuesta es que ‘no podemos estar seguros’, entonces, lo que estamos diciendo es que los animales tienen algún valor ¿moral? y que la restricción de no agresión tiene algún sentido mínimo (que está por debajo de si se trata de personas) cuando hay consecuencias sobre animales”.
Por otro lado, sostuvo que cuando se dice que el sufrimiento perse de un animal es algo moralmente relevante entonces ya no se podría estar seguro que la prohibición de las corridas se trata simplemente de un atentado contra la libertad de quienes disfrutan con los toros, pues “en ejercicio de esa libertad están agrediendo algo que para otros es moralmente relevante”.
Congresistas insistirán en prohibir corridas de toros
Varios congresistas rechazaron el fallo de la Corte y anunciaron que insistirán que se prohíba de nuevo la actividad taurina. En este sentido, la bancada del Partido Liberal anunció que presentará un proyecto de ley que prohíba de nuevo las corridas de toros y otro tipo de espectáculos violentos con animales.
El senador del Partido de la U, Armando Benedetti, también rechazó la decisión judicial.
“Yo creería que alguien tuvo que influir en esa decisión, porque no creo que los mismos magistrados cambien de parecer de esa manera. La Corte Constitucional está peor que el Congreso, que hace leyes a la medida de quien las manda a hacer”, indicó.
Asimismo, el alcalde de Bogotá lamentó la decisión.
Lamento decisión de Corte Constitucional que vuelve a permitir corridas de toros. Espero que se respete la autonomía democrática municipal y que podamos darle a la Plaza Santamaría y otros inmuebles municipales, el uso que decidamos, interpretando el sentir de nuestros ciudadanos
— Enrique Peñalosa (@EnriquePenalosa) August 23, 2018