Tras la sorpresiva decisión por la sala plena de la Corte Constitucional de tumbar la obligatoriedad que tenía el congreso de votar en bloque, la corporación consideró que esto violaba el principio de separación de poderes.
La decisión adoptada por el máximo tribunal es un duro golpe al Acuerdo Santos-FARC.
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Tras un intenso debate jurídico, la Corte Constitucional tumbó dos numerales claves del Acto Legislativo 01 de 2016 por el cual se aprobó el Fast Track.
Se trata de los numerales H y J del Acuerdo. En el numeral H se planteaba que todas las modificaciones relativas a proyectos de ley o actos legislativos tenían que respetar lo pactado en el Acuerdo final y estos debían tener el aval del Gobierno Nacional para poder tramitarse.
Esta medida fue fuertemente criticada ya que el ejecutivo se estaría entrometiendo en funciones legislativas.
Para el máximo tribunal, esta función en la cual el Gobierno tuviera la potestad de dar avales como resultado se tendría una sustitución de poderes yendo en contra vía de la Constitución Política.
Por otra parte, el numeral J del Acto Legislativo disponía que en la comisión y las plenarias se decidiría sobre la totalidad de cada proyecto, con las respectivas modificaciones del gobierno, en una sola votación.
En palabras de la Corte, ahora se tendrá que votar artículo por artículo y modificación por modificación.
Para el senador Ivan Duque, senador del partido de oposición Centro Democrático y demandante del Acto Legislativo, dijo para el PanAm Post:
“En ocasiones he reiterado que la paz, se debe hacer en defensa de la Constitución y no puede ser un premio a los criminales imponiendo su visión sobre el orden constitucional.”
Tras conocer el fallo, el apoderado del grupo guerrillero de las FARC, Enrique Santiago, arremetió contra el máximo tribunal.
Santiago dice que se encuentra preocupado tras la decisión manifiesta que la mejor vía sería poner en marcha una constituyente.
El asesor jurídico de las FARC señaló que:
“Llegamos a la conclusión de que la institucionalidad no funciona, y si no funciona toca cambiarla. Y la única forma sería con la constituyente […] La Corte ha congelado el proceso de paz, acaban de paralizar el proceso. Esto crea problemas jurídicos [esto] es sumamente grave. Es imposible continuar la implementación legislativa urgente que está establecida en el punto 6 del acuerdo”.
Varios sectores del país que han apoyado la implementación final de Acuerdo Santos-FARC manifiestan que esta decisión dificulta enormemente los tramites en el congreso. Indican que los debates serán mucho más lento y temen por las consecuencias sobre la Ley Estatutaria que pondrá en funcionamiento la Justicia Especial para la Paz.
Fuente: Semana, El Espectador