El narcotráfico mexicano ha buscado maneras para diversificar su mercado, especialmente en su sus rutas a Estados Unidos para el tráfico de marihuana, metanfetaminas, cocaína y cristal. En este sentido, se ha identificado que están utilizando productos para públicos específicos como los millennials que consumen los llamados “gourmet”.
Según reportes de la Policía Federal y de la secretaría de Marina-Armada de México, estas organizaciones que operan en el país azteca han utilizado salsas, jugos, café, envases de cajeta, productos enlatados, supuesta crema humectante, nopales en escabeche, dulces, membrillo, entre otros, para hacer llegar la droga al mercado de Estados Unidos.
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Esta nueva forma de traficar estupefacientes no solo es para evitar que las sustancias sean detectadas mientras llegan a Estados Unidos en donde se realiza la mezcla y demás procesos químicos para separar la droga, sino también para abrir un nuevo mercado de productos en los que la sustancia se disuelve o mezcla para poder llegar a nuevos mercados de consumo.
Las maneras en que se transporta también han evolucionado, ya que se utilizan envases de shampoo, productos de belleza, bocinas, muñecos de peluche, ropa, revistas, lápidas, imágenes religiosas, floreros, figuras de cerámica, entre otros.
Las incautaciones más grandes se han realizado en las centrales de autobuses y aeropuertos de Tijuana, Jalisco, Ciudad de México, Michoacán y Guerrero, en donde se presume que es dominante la presencia de organizaciones criminales como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Sinaloa, células de Los Templarios y el Cártel de Tijuana.
Por su parte, Martín Íñiguez, especialista en seguridad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indica que el traslado de estas sustancias ilícitas en comida está tomando fuerza en el país azteca y podría ser considerado como un nuevo mercado dirigido específicamente a los millennials.
Según el especialista, los narcotraficantes están usando a este sector de la población para realizar envíos pequeños por medio de empresas de paquetería y mensajería en los estados fronterizos y en aquellos en donde se tiene detectada la producción de drogas sintéticas: “Se ha ido sofisticando un poco más el tráfico de droga en productos alimenticios y diversos objetos, en realidad es una moda, pero lo que veo es que el mercado más grande, desafortunadamente, son los jóvenes y es donde se están concentrando los criminales”, aseguró Íñiguez.
Entre el 1 de diciembre del 2012 y el 30 de junio del 2017, la Unidad Canina de la Policía Federal ha realizado 2.011 incautaciones en terminales de autobuses, aeropuertos y operativos en carreteras.
El maestro en ciencias penales del Inacipe, Martín Barrón Cruz, indicó que los grupos criminales tienden a buscar nuevas maneras de transportar la droga a Estados Unidos, pero, a la vez, nuevos medios como escondites y productos por medio de los cuales pueda pasar desapercibida.
Fuente: El Universal.