Los economistas en jefe de los bancos JPMorgan, Goldman Sachs y Barclays, indicaron que en el caso extremo de que se cancelara el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el país menos perjudicado sería México, por sobre Estados Unidos y Canadá.
Gabriel Lozano, economista en jefe para México de JPMorgan, detalló: “Si se cancela el TLCAN tendría que haber una cierta depreciación del peso que a fin de cuentas terminaría por beneficiar a la economía mexicana. Eso fue lo que pasó a principio de año”.
Y agregó: “El tipo de cambio empezó a absorber este choque y empezó a reflejar efectivamente lo que debería de ser necesario para compensar la pérdida por el acceso al mercado libre de Norteamérica. Esa es una posibilidad”.
- Lea más: Más de la mitad de lo que México compra a EE.UU. lo hace fuera del TLCAN: secretario de Hacienda
- Lea más: Presidente del Senado de México apoya retiro de su país de renegociación del TLCAN
Una eventual eliminación del TLCAN “podría debilitar ligeramente al peso mexicano como una medida de que se compense el pago de impuestos en el comercio de mercancías hechas por el país con las otras dos naciones”, según indica el diario especializado El Financiero.
Al respecto, Alberto Ramos, economista en jefe de Goldman Sachs, indicó: “Desde el punto de vista de México, en una situación como esa (abandonar el TLCAN), el tipo de cambio se depreciaría, lo que garantizaría la competitividad externa. Hasta puede imaginarse un escenario en el que el tipo de cambio se mueva más que la tarifa arancelaria promedio y así la competitividad externa mejoraría”.
Por su parte, Marco Oviedo, economista en jefe para México de Barclays, aseguró que el tipo de cambio ya incluso ha incorporado este escenario, por lo que la moneda no debería reaccionar mucho más: “La gran ventaja que tiene México frente a Estados Unidos y otros países es que cuenta con una moneda sumamente flexible, que inmediatamente va a ajustarse a la nueva realidad”, dijo el especialista.
Oviedo estimó un tipo de cambio de aproximadamente 18,70 pesos por dólar en un escenario sin tratado y agregó: “Si acaba el TLCAN podría suceder que menos manufactura se desarrolle en Estados Unidos. Incluso podría darse un escenario en el que México plantea su salida y que Estados Unidos quiera seguir trabajando”.
Sin embargo, los especialistas detallaron que aunque se eliminara el TLCAN, no significaría el final del intercambio comercial entre México y Estados Unidos, aunque está el peligro de que algunos rubros, como el de la inversión, se verían afectados.
“México debe buscar mecanismos que le den certeza a los inversionistas de Estados Unidos y Canadá, de que sus inversiones están protegidas, si no se va a generar desconfianza de que algunas cuestiones también se tengan que lidiar bajo leyes mexicanas”, mencionó Oviedo.
Mientras que Gabriel Lozano, de JPMorgan, habla de diferentes canales de transmisión, uno de estos sería la pérdida de protección institucional, es decir, del marco legal que representa para las empresas un tratado comercial.
Fuente: El Financiero