El subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Miguel Ruiz Cabañas, dijo este jueves ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) que su país no aceptará muros fronterizos ya que representan extremismo e intolerancia.
Estas declaraciones del funcionario se dieron en la reunión del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas en Ginebra, Suiza. En esta oportunidad Ruiz Cabañas indicó que México cree “que los muros entre las naciones son también muros entre las personas y materializan el extremismo y la intolerancia en barreras físicas e ideológicas, que no aceptaremos bajo ninguna circunstancia”.
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“Debemos por ello condenar el ultranacionalismo populista que, al ser explotado como herramienta política, impacta a las democracias y afecta severamente las libertades y los derechos fundamentales” dijo el funcionario mexicano.
Ruiz Cabañas también señaló que los derechos humanos son universales, interdependientes e interrelacionados, por lo que “no es posible defender a unos e ignorar a otros, ni defenderlos para algunas personas y negarlos para otras”. El funcionario no mencionó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pero sí indicó la situación de vulnerabilidad que enfrentan los migrantes “con el argumento de la protección de la seguridad nacional que solo atenta contra sus derechos humanos más fundamentales y su integridad”.
1/3 Vice minister @miguelrcabanas reiterates to #HRC34 @UNHumanRights #Mexico’s conviction to defend the fundamental values of humanity pic.twitter.com/lEzDtHwpQG
— Misión de México en Ginebra (@MisionMexOI) March 2, 2017
“No nos equivoquemos, detrás de esos discursos se esconden el racismo y la xenofobia” dijo Ruíz Cabañas, quien agregó: “Subrayo que las medidas de seguridad mal concebidas no solo no detienen la movilidad humana, sino que además fomentan riesgos y vulnerabilidad en los migrantes, poniendo en peligro sus vidas. Se trata de medidas equivocadas, tanto desde un punto de vista moral como práctico, dado el altísimo costo social que conllevan”.
Fuente: Milenio