La guerra contra el narcotráfico en México no solo ha dejado lastimada a la población civil con decenas de miles de muertos, también ha impactado en las Fuerzas Armadas de ese país ya que esta institución ha perdido en 10 años a 498 elementos de los cuales 246 han perdido la vida en enfrentamientos contra los grupos delictivos y 252 murieron en accidentes aéres, de automóvil, por caida o ahogados mientras combatían el narcotráfico, y 403 resultaron heridos.
Mientras que los resultados del Ejército mexicano durante la última década ha sido el aseguramiento de 146 aeronaves, 110 embarcaciones, 510 lanza granadas, 9.792 granadas, 1.283 pistas clandestinas, USD$ 52 millones 116.000 y 150.218.223 pesos mexicanos.
La mayoría de los soldados muertos se registran en el gobierno del expresidente Felipe Calderon ya que fueron en los primeros años de su gestión cuando se dieron mayor número de detenciones, incautaciones y quejas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). De cada 100 presuntos delincuentes que murieron en enfrentamientos, 12 fueron soldados.
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“Son más de 10 años, la primera vez que un presidente utilizó a las Fuerzas Armadas para una operación en zonas urbanas, contra el narcotráfico, fue el 11 de junio del 2015, cuando Vicente Fox anunció el operativo México Seguro, luego vino el gobierno que lo enfrento y ahora este gobierno no ha tenido ninguna estrategia para combatir al crimen organizado” dijo Javier Oliva, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Respecto a los gobiernos de Calderón y Peña Nieto, el experto señala: “son sexenios totalmente diferentes. En el anterior, cuando empezamos estos apoyos, realmente no sabíamos a qué nos enfrentábamos, pensamos que sería un ejército enemigo con tácticas, técnicas, estrategias y disciplina, pero nos topamos con gente totalmente desalmada, por ello nos tuvimos que capacitar en varios aspectos y hacerle frente a esta amenaza” explica.
Este tipo de delincuencia también reclutó a menores de edad, y las cifras lo revelan ya que entre diciembre de 2006 y enero de 2016 el Ejército mexicano detuvo a 4.249 adolescentes mismos que fueron presentados ante el Ministerio Público.
“Haber sacado a las Fuerzas Armadas a la calle era indispensable, necesario por la violencia que se venía en contra de los ciudadanos, puesto que los grupos del crimen organizado no solamente estaban en el trasiego de droga, empezaban a secuestrar, extorsionar y a cobrar derecho de piso, aquí el problema ha sido que no le han dejado a las Fuerzas Armadas el manejo de la estrategia” explica José Antonio Ortega, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal.
Sobre el sentir del Ejército mexicano en su papel en la guerra contra el narcotráfico, Ortega afirma que “los soldados no están contentos, están pagando el costo político de estar en la calle, han tenido que aguantar la crítica muy fuerte de diversos sectores de la sociedad, especialmente cuando ha habido daños colaterales o matanzas, aunque jurídicamente no se les comprueba nada”.
“No es su tarea, lo están haciendo de manera subsidiaria, obedecen porque su jefe supremo, el presidente, así se los ha ordenado” afirma el experto.
Fuente: El Universal