La Universidad Autónoma de Honduras (UNAH) creía haber superado los tiempos de décadas pasadas en los que era trinchera de batallas, las cuales tenían más que ver con disputas políticas e ideológicas que con exigencias académicas. Pero las tomas han vuelto, específicamente al campus ubicado en San Pedro Sula (UNAH-VS), en el norte de Honduras, donde hace 17 días el Comité Estudiantil optó por ocupar el centro de estudios en señal de protesta ante un conjunto de reformas académicas que adelanta la rectoría.
Dentro de la medida de cambio que más molesta a los universitarios está el incremento del porcentaje mínimo de aprobación de las materias de un 60% a un 70% de la nota máxima, requisito con el cual, según ellos, podrían quedar marginados de la educación. Entre otras exigencias está la descentralización del presupuesto de la universidad a los centros regionales.
El pasado lunes, estudiantes a cargo de esta protesta han amenazado con extender la manifestación a la sede universitaria localizada en Tegucigalpa, según declaró Cesario Padilla, dirigente del Movimiento Amplio Universitario (MAU). “La próxima semana en solidaridad con los compañeros en San Pedro Sula nosotros vamos a hacer lo propio acá en Tegucigalpa, con protestas, porque protestar es un derecho constitucional y nos están criminalizando”, manifestó el dirigente.
Esta protesta ha causando la interrupción de las actividades para casi 24.000 estudiantes que hasta el día de hoy siguen sin poder regularizar sus clases, y ven en peligro el término del período que está en curso.
“Los estudiantes no están solos”
Julieta Castellanos, rectora de la máxima casa de estudios del país, ha denunciado que estas protestas tienen un claro tinte político-ideológico, y responsabiliza de esto directamente a los sectores más radicales del partido Libertad y Refundación (LIBRE), liderado por el expresidente Manuel Zelaya Rosales.
Según Castellanos, hasta este martes los estudiantes no han presentado un planteamiento claro de lo que exigen, con lo cual han agudizado la situación y han fortalecido sus aseveraciones de que “no lo están haciendo solos”. Responsabiliza con ello a docentes que forman parte del partido político LIBRE.
Castellanos dejó claro que no dialogará con los manifestantes mientras mantengan bajo su control las instalaciones del campus de la UNAH-VS.
Consejo Universitario aprueba normas de permanencia
El pasado lunes el Consejo Universitario ha ratificado las normas de permanencia, que habían sido aprobadas a finales de septiembre y que constituyen un reglamento de 372 artículos. El más crítico y contestado era el que especifica el 70% de calificación mínima para la aprobación, el cual se hará efectivo a partir del próximo año.
El Índice de Graduación de 70% será aplicado a los estudiantes matricula 2015.
— Julieta Castellanos (@JulietaRectora) October 28, 2014
“El índice de aprobación para el ingreso del 2015 es del 60% el primer período, a partir del tercer período el índice de aprobación será de 65% y para el 2016 será del 70% para todo el estudiantado”, confirmó Castellanos, evidenciando así el incremento gradual del índice que reclaman los manifestantes.
Alumnos afectados y reacciones independientes
La mayoría de los estudiantes se ven afectados por estas manifestaciones ya que el período en curso es el último del año y se ve en peligro el avance en sus carreras, y en algunos casos hasta la culminación de las mismas.
Una de las afectadas, Azucena Paredes, estudiante por egresar de la carrera de Economía, expresó al PanAm Post: “Considero que la lucha no se está llevando de forma correcta ya que nos están arrebatando nuestro derecho a una educación libre y no es precisamente la rectoría quien lo hace en estos momentos, sino los otros compañeros que en sus manifestaciones tienen presa a toda una población estudiantil”.
Por otro lado, Christian Betancourt, miembro de Estudiantes por la Libertad Honduras ha calificado lo que acontece como una “situación lamentable”.
“Las organizaciones estudiantiles tienen razón en varias de sus peticiones, arbitrariamente les han cambiado las reglas. Sin embargo, al extenderse la protesta están afectando a estudiantes que no pueden asistir a sus clases ni avanzar en su carrera, aunque compartan los puntos de vista que han detonado la toma”, dijo Betancourt al PanAm Post.
Actualmente la situación de protesta y diálogo se encuentra muy lejos de encontrar un punto en común, ya que ninguno de los lados asoma señales de ceder, y según las más recientes declaraciones de los dirigentes estudiantiles, la manifestación podría extenderse a las calles en las próximas horas.