Sao Paulo, 13 may (EFE).- El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, pidió este viernes en una ceremonia de graduación de policías la unión de “civiles y militares” para salvaguardar “la libertad”, amenazada por “delincuentes” que actúan “desde gabinetes con aire acondicionado”.
“Nosotros, personas de bien, civiles y militares, necesitamos a todos para garantizar la libertad porque los delincuentes del pasado hoy usan otras armas, también desde gabinetes con aire acondicionado, buscando robar nuestra libertad”, dijo el mandatario en la Academia de Policía de Barro Branco, en la ciudad de Sao Paulo.
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El líder de la derecha regional, que aspirará a renovar su mandato en octubre, afirmó ante los oficiales recién formados que esos presuntos “criminales” comienzan “robando la libertad de expresión y fustigando a las personas de bien haciendo que desistan de su propósito”.
“Nosotros, Fuerzas Armadas, nosotros, fuerzas auxiliares, no dejaremos que eso ocurra. Nosotros defendemos nuestra Constitución, nuestra democracia y nuestra libertad”.
Y completó: “Tiempo atrás juramos dar la vida por nuestra patria, pero cada vez más, ese ejército de personas de bien, civiles y militares, deben unirse para evitar que roben nuestra libertad”.
Bolsonaro mantiene desde hace meses un pulso con el Supremo Tribunal Federal (STF), que le investiga por supuesta desinformar sobre la pandemia de COVID-19 y el proceso electoral.
El presidente brasileño ha acusado a magistrados del Supremo de actuar en favor de la elección del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, quien tenía dos condenas por corrupción y le fueron anuladas por la mayoría de jueces progresistas designados durante los gobiernos de Lula da Silva y de Dilma Rousseff.
Bolsonaro anima a los policías a usar las armas contra los bandidos
Asimismo, Bolsonaro volvió a defender este viernes que se supriman por ley los castigos a los policías que, por ejemplo, maten a un delincuente en ejercicio de sus funciones, y les animó a usar sus armas contra los bandidos.
“Muchas veces nuestros enemigos están dentro de un gabinete, con aire acondicionado y, allí, (hay) un burócrata que hace infernal la vida de ustedes tras cumplir una misión”, indicó el jefe de Estado dirigiéndose a los uniformados.
El líder brasileño apostó por reducir la letalidad, pero apenas la que afecta a “ciudadanos de bien” y policías, “no la de los bandidos”.
“Si están en la calle y portan un arma en la cintura o el pecho es para usarla y nosotros, jefes del Ejecutivo, ya sea el presidente o el gobernador, debemos darles respaldo y seguridad tras el cumplimiento de la misión”, añadió.