El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, consideró este martes que quien cometió un “golpe de Estado” en Bolivia fue Evo Morales, al que acusó de haber tratado de “robar” las elecciones del 20 de octubre.
“La sangre en las manos es de aquellos que cometieron el fraude electoral, la OEA no dio un golpe de Estado, dieron un golpe de Estado quienes se robaron la elección declarando un triunfo en primera vuelta”, afirmó Almagro en un Consejo Permanente de la OEA sobre Bolivia.
Estas declaraciones suponen un cambio de postura de Almagro, que hasta ahora había evitado criticar abiertamente a Morales por las elecciones y que había apoyado su derecho a la reelección, a pesar de que el líder indígena perdió en 2016 un referéndum para optar a un cuarto mandato, algo que finalmente logró hacer tras recibir el respaldo del Tribunal Constitucional de Bolivia.
Morales renunció el pasado domingo a la Presidencia tras una recomendación de los militares después de que se publicara un informe de la OEA en el que se denunciaban graves irregularidades en los comicios del 20 de octubre, en los que fue reelegido para un cuarto mandato.
“Sí que hubo un golpe de Estado en Bolivia, ocurrió el día 20 de octubre, cuando se cometió el fraude electoral que tenía como resultado el triunfo del expresidente Evo Morales en primera vuelta”, subrayó Almagro, un fiero crítico del Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En los últimos días, varios países, como México, habían criticado a Almagro por guardar silencio tras la renuncia de Morales.
“He escuchado críticas a nuestro trabajo”, reconoció Almagro. “La vergüenza -contestó- no es de la OEA que descubre un fraude electoral, es de aquellos que lo cometieron. La vergüenza no es de la OEA que hace un informe técnico irrefutable, es de aquellos que quisieron burlar al pueblo”.
Almagro consideró que lo cometido es un “autogolpe” y apuntó como responsable al órgano electoral de Bolivia, que durante el conteo de votos interrumpió el recuento en un momento en el que se abría la puerta a una segunda vuelta entre Morales y el opositor Carlos Mesa.
El órgano electoral acabó proclamado vencedor a Morales en primera vuelta, pero el Gobierno aceptó que la OEA hiciera una auditoría de carácter vinculante de los resultados de los comicios ante las supuestas irregularidades, que luego fueron confirmadas por los expertos electorales del bloque hemisférico.
“Esta forma de autogolpe no es algo nuevo, ya lo había intentado (Slobodan) Milosevic en Serbia, así como otros países del continente africano y de este”, señaló Almagro.
Morales, que se encuentra asilado desde hoy en México, había logrado un acuerdo con Almagro para que una misión de observación electoral de la OEA supervisara los comicios.
Renuncia el embajador de Bolivia ante la OEA en medio de crisis en el país
Este mismo martes, el embajador de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), José Alberto Gonzales, presentó su “renuncia irrevocable”.
Gonzales, representante de Bolivia ante la OEA desde septiembre de 2018, comunicó su decisión en un nota a la Presidencia del Consejo Permanente del bloque hemisférico, que rota entre los 34 Estados miembros activos y que está ocupada actualmente por la embajadora de Guatemala, Rita Claverie.
“Distinguida presidenta: Me permito informarle que a primera hora de hoy he presentado mi renuncia irrevocable al cargo de representante permanente del Estado Plurinacional de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA). Sin otro particular, aprovecho la ocasión para saludar a usted atentamente”, reza la nota, firmada abajo por el embajador.
Hoy la OEA celebró una reunión extraordinaria de su Consejo Permanente para evaluar la situación en Bolivia y el sillón destinado al país andino estuvo ocupado por Tania Paz, una de las representantes alternas de la misión boliviana y que leyó un comunicado del canciller de Bolivia, Diego Pary.
En ese comunicado, Pary cuestionó el papel que ha jugado el secretario general de la OEA, Luis Almagro, al que instó a “convocar a la pacificación y no a la confrontación”. Además, criticó la auditoría que llevaron a cabo expertos de la OEA sobre los resultados electorales del 20 de octubre, en los que se detectaron irregularidades “muy graves” y que se llevaron a cabo después de que el órgano electoral de Bolivia proclamara a Morales vencedor en primera vuelta.
A juicio de Pary, esa auditoría solo fue una “excusa para consumar la ruptura del orden constitucional y destituir a Morales”.