Por Jesús Melgarejo:
El portal WikiLeaks famoso por filtrar documentos diplomáticos de alto grado de confidencialidad, posee entre sus archivos varios informes con datos detallados sobre Paraguay y su situación geopolítica. Supuestos amaños electorales, procedimientos diplomáticos y posibles escenarios electorales son parte del contenido filtrado.
La fuente diplomática coincide y da credibilidad a las acusaciones que en su momento denunció Luis Castiglioni cuando confirmaba que su derrota en las internas coloradas se debió a un gran fraude en las urnas.
La victoria de Lugo en 2008
Luego de 61 años de continuo gobierno colorado, Paraguay experimentaría un cambio histórico cuando la Alianza Patriótica para el Cambio (APC) en la figura de Fernando Lugo —con el apoyo del Partido Liberal— lograba imponerse a la candidata colorada, Blanca Ovelar. En las mismas elecciones fueron partícipes Lino Cesar Oviedo por el UNACE y Pedro Fadul (PQ). En el contexto histórico de estas elecciones hubo un quiebre en la Asociación Nacional Republicana (ANR) luego de denuncias de fraude en las internas. Este hecho en particular sería clave a la hora de las votaciones generales, dada la división en el tradicional partido, que benefició a la oposición.
El informe que data del 31/03/2008 y cuya clasificación está etiquetada como CONFIDENCIAL, tiene como supuesto autor a Michael J. Fitzpatrick, ex Subsecretario Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental a cargo de la región andina, Brasil. Fitzpatrick se desempeñaba entones como Ministro Consejero de la Embajada de los EE.UU. en Asunción. En el documento se describe el contexto electoral de las presidenciales del mismo año, y detallan hechos muy llamativos. El manejo de la información que poseían los mandos estadounidenses sorprende y expone el grado de conocimiento que el país norteamericano tiene de los sucesos políticos de la región.
Dicho informe incluía un perfil detallado de cada candidato, nombrando a Blanca Ovelar como representante del Statu Quo, a Fernando Lugo como forastero político, Lino Oviedo como «el caballo oscuro a observar» y a Pedro Fadul como «el candidato más preparado» y «un político de estilo estadounidense».
En el documento puede observarse cómo las fuentes diplomáticas tenían pleno conocimiento de posibles hechos de irregularidades durante las votaciones. El informe expresa lo siguiente:
«Podemos esperar ver algunas compras de votos previas a las elecciones durante las próximas semanas. El día de las elecciones, deberíamos ver una fuerte participación electoral, acompañada de contratiempos organizativos y peleas menores. No esperamos tener claridad de la noche a la mañana sobre un resultado aceptado por todos los candidatos».
Luego puede leerse un minucioso análisis del contexto dentro de la estructura del Partido Colorado, donde Blanca Ovelar es catalogada como una «tecnócrata brillante y bien educada», pero que carece de experiencia política y de su propia base política, incluso dentro de su propio partido. Además, lucha por encontrar su propio camino y deshacerse de la influencia de su mentor, el presidente Duarte, y otros poderosos miembros de la «mafia» del Partido Colorado que participan en muchas de las actividades corruptas de los países.
El amaño electoral
El análisis continúa revelando un dato bastante alarmante sobre un supuesto fraude electoral ocurrido en las internas coloradas, lo que generó una fuerte enemistad ente Blanca Ovelar y Luis Castiglioni (candidato a presidente por el mismo partido).
La fuente diplomática coincide y da credibilidad a las acusaciones que en su momento hacía Luis Castiglioni cuando confirmaba que su derrota en las internas coloradas se debió a un gran fraude en las urnas.
«El mayor desafío de Ovelar es que todavía no se ha ganado la facción de Luis Castiglioni de su propio partido (y mucho menos el propio Castiglioni, una relación aún más envenenada por el conocimiento de Castiglioni que perdió las primarias en diciembre solo por fraude en el conteo de votos en enero). En general, el Partido Colorado no está entusiasmado con la candidatura de Ovelar, pero, sin embargo, movilizará su poderosa maquinaria en su nombre porque es su candidata».
Por el lado de Fernando Lugo, era considerado como el más vulnerable a las influencias externas refiriéndose a Venezuela, que según datos sensibles del mismo informe había financiado una pequeña parte de la campaña electoral del ex obispo. También destacan a Lugo como el único candidato con vínculos (débiles) con ex miembros de PPL (Partido Patria Libre), hoy convertido a EPP (grupo terrorista autodenominado Ejercito del pueblo paraguayo).
El documento nuevamente hace una afirmación bastante grave sobre fraude electoral haciendo hincapié en el Partido Colorado como uno de los mayores impulsores de estas prácticas: «En las próximas semanas antes de las elecciones, todas las partes participarán en la compra de votos, así como en la compra (o intento de compra) de los representantes de los partidos políticos que se sentarán en cada mesa de votación el día de las elecciones. Nadie hace esto mejor que los colorados. Los partidarios de Castiglioni predicen que los colorados robarán alrededor de 100 000 votos en aproximadamente 700 colegios electorales (donde ya dominan) al alterar las actas electorales (“Actas”). La mayoría está de acuerdo (y la historia lo demuestra) en que esto es fácil de hacer y difícil de probar, ya que las papeletas se destruyen una vez que cesa la votación y se firman las Actas».
¿Qué haría Washington?
Dentro del documento diplomático se barajaban varios posibles escenarios y hechos que podrían incidir de manera directa en el desarrollo de las elecciones, en donde, inclusive, se considera un posible intento de asesinato contra Fernando Lugo y cuya culpabilidad caería sobre Lino Oviedo sacando a ambos de la carrera electoral.
El informe cierra explicando qué postura debe tomar Estados Unidos en caso de comprobarse el supuesto fraude electoral, y también expone todo el protocolo diplomático a ser ejecutado dependiendo de quién sea elegido como nuevo presidente del Paraguay:
«Que Washington trabaje con Post (fuente) en una estrategia de diplomacia pública posterior a las elecciones. Dicha estrategia debe considerar cómo responderemos al fraude electoral y/o retrasos en los resultados, y debería exigir un proceso y una transición posteriores a las elecciones pacíficos y ordenados».
El informe espeta que «Washington debería estar preparado para felicitar rápidamente al ganador y prestar especial atención a lo que dirá si gana Oviedo, dadas sus turbias credenciales democráticas». Detalló, además, que Asuntos Consulares debían estar preparados para otorgarle una visa al presidente electo de Paraguay casi inmediatamente después del 20 de abril.
Luego se señalaba que «Washington planea enviar (tal vez el subsecretario Shannon) en el período inmediatamente posterior a las elecciones del SIPDIS (de principios a mediados de mayo) para dejar en claro el interés de Washington en las relaciones estrechas con el presidente electo de Paraguay».
Además, se desarrolló un punto de partida inicial para las acciones que tomaría EE. UU. con un triunfo de Lugo: «Que Washington esté preparado para ofrecer algún otro tipo de paquete de asistencia si Lugo gana, que incluya organizar su gobierno y trabajar con el Congreso (que tiene un papel muy importante según la Constitución de Paraguay). Washington debe estar preparado para responder a las solicitudes de mayor asistencia en materia de lucha contra los estupefacientes, derechos de propiedad intelectual y cuestiones de mil a mil. También debe estar preparado para ofrecer capacitación para el destacamento de seguridad personal del presidente electo».
Conclusión
La mayoría de los acontecimientos presentes en el informe son rumores que siempre se han manejado dentro de la política paraguaya, y cuya nula trascendencia se debe a la falta de pruebas fehacientes o a que los implicados directos son quienes estando dentro del poder manejan los mecanismos institucionales cuidando sus propios intereses. Que estos documentos clasificados provengan de altos mandos de los Estados Unidos, otorga un gran peso de credibilidad a los hechos descritos, exponiendo a su vez el grado de conocimiento que posee el país norteamericano dentro de problemas internos del Paraguay y de la región.
Jesús Melgarejo escritor y periodista con énfasis en filosofía y sociología.