Por Erik Encinas
Venezuela está sumida en el caos absoluto bajo la narcodictadura de Nicolás Maduro, muerte, violencia y miseria rodean a los venezolanos. Sin embargo, la extrema izquierda de España se ha lucrado de este régimen autoritario como también lo ha hecho con Bolivia, Cuba e Irán, los primeros de la lista, los fundadores de Podemos. Por ello, no es extravagante que haya habido contacto entre el ejecutivo socialcomunista y la narco dictadura chavista de Nicolás Maduro, como es el caso de la reunión en suelo español, según el Constitucional y la justicia europea, entre el ministro de Transportes, José Luis Ábalos y la número 2 de Maduro, Delcy Rodríguez, quien según la periodista venezolana Ibéyise Pacheco, quería mantener también una conversación con el presidente Pedro Sánchez y el vicepresidente Pablo Iglesias. Ante esta situación es normal que se hayan disparado las alarmas internacionales. Una de ellas es en Estados Unidos, donde ya empiezan a preguntarse seriamente qué relación tiene el gobierno socialcomunista con los chavistas. Y más pronto que tarde tendrán que rendir cuentas con la Justicia por ser cómplices del régimen de Maduro.
Pero partiendo de los hechos, Ábalos debería haber dimitido por negar en un primer momento ese encuentro y luego verse obligado por la realidad a tener que admitirlo, pero esa palabra parece que no existe en su diccionario ni tampoco en los demás miembros que conforman la coalición radical. Por ahora, para suerte de la izquierda, la pandemia del coronavirus les has reducido el foco de la polémica y el evitar temporalmente tener que dar explicaciones sobre su relación con el régimen chavista, pero no deben huir de la verdad y no descarto varias detenciones del ejecutivo socialcomunista en el futuro, según fuentes norteamericanas, que exigen la entrega Hugo Carvajal, exjefe de inteligencia militar de Venezuela. Un delincuente donde los haya protegido por el CNI, que conoce las conexiones entre la izquierda española y el régimen chavista. Es necesario de que lo entreguen inmediatamente a Estados Unidos y caiga quien tenga que caer en España.
De todos modos, creo que muy posiblemente veremos dimisiones en el futuro, porque como sigan este paso hacia una deriva muy preocupante, está claro que no son descartables, más aún cuando se sabe que la formación Podemos ha sido clave en todo este vergonzoso desprecio al pueblo venezolano. No olvidemos que los podemitas no reconocen a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela y sí a Nicolás Maduro, si no como un simple opositor de un país en el que sí hay presos políticos y miles de venezolanos asesinados, además de millones de venezolanos que han huido del país hispanoamericano.
Y conviene recordar que el presidente del ejecutivo español no ha querido recibir nunca con honores de Jefe de Estado a Juan Guaidó como si ha hecho la oposición española en Madrid o líderes internacionales como Emmanuel Macron, Boris Johnson o Ángela Merkel, poniéndose así al lado del dictador Maduro y quedando fatal en la historia de España, ya que el pueblo venezolano es más que un amigo: es un hermano hispano con el que por ahora el Gobierno español no ha estado para nada a la altura y en el bando equivocado, pero sin la menor duda la historia les juzgará. En una palabra: vergonzoso.
Erik Encinas Ortega es graduado en Periodismo por la Universidad Pompeu Fabra. Miembro del Colegio de Periodistas de Cataluña. Colaborador en diferentes medios de comunicación, entre ellos, Radio Rubí, Mediterráneo Digital, VAVEL deportes y Radio Las Palmas.