EnglishDebido a los altos índices de inseguridad que hay en el estado mexicano de Guerrero, cada vez son más los empresarios que deciden hacer las maletas y marcharse hacia otros lugares. Entre las últimas empresas en abandonar la ciudad de Iguala, están Volkswagen, Canteras de México y Coca-Cola.
Este estado ha sido el epicentro de hechos como la desaparición de los 43 estudiantes normalistas, y donde es común que los habitantes sean extorsionados, secuestrados y víctimas de violentos asesinatos, por tratarse de un territorio clave en enfrentamientos entre carteles.
Dada la violencia que se vive Guerrero, que al mismo tiempo es uno de los estados más pobres del país, Coca Cola Femsa informó que cerró definitivamente su centro de distribución en el municipio de Arcelia y en Iguala. Ahora esa tarea será tercerizada, y se mantendrán las operaciones en otras partes de este mismo estado.
“El 20 de mayo se suspendieron definitivamente las labores del Centro de Distribución en Arcelia, con base en la evaluación final de la operación, de acuerdo con las condiciones del entorno. Por esta razón fueron desincorporadas 47 personas, según lo que estipula la ley”, indicó la empresa en un comunicado.
Zacarías Rodríguez Cabrera, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de México, indicó que es un “asunto grave” el hecho de que empresas importantes se hayan retirado de Iguala. También dijo que la empresa alemana Volkswagen cerro su oficina allí al igual que la automotriz Seat.
La empresa Femsa, que es líder en embotellamiento de Coca Cola, no confirma que su retiro de esa región se deba a la inseguridad, pero había alertado en su reporte anual 2014 sobre la presencia de violencia entre los cartel. “La inseguridad en México podría incrementar, y esto podría afectar negativamente nuestros resultados. La presencia de violencia entre los carteles de la droga, y entre ellos y las fuerzas armadas que buscan aplicar la ley, pueden representar un riesgo para nuestro negocio”, señalan en el texto.
Entre otras situaciones de inseguridad, Coca Cola Femsa había cerrado de forma temporal su distribuidora en Chilpancingo, Guerrero, luego de que un grupo de delincuentes mantuvieran secuestrados a dos de sus empleados a cambio de que la justicia liberara a tres compañeros que habían sido arrestados por saquear camiones con mercadería.
Con el cierre de la distribuidora, Coca Cola se vio forzada a despedir a 600 empleados.
Coca-Cola se convirtió en una víctima más de la inseguridad en Guerrero http://t.co/O1MDJaCRXD pic.twitter.com/9eMh8YKwo9
— MT_enMEXICO (@MT_enMEXICO) June 25, 2015
Rodríguez Cabrera indicó que además de estas compañías, otro 10% de comerciantes del total de 400 empresas inscritos en la Cámara, habrían cesado sus operaciones.
En relación con el clima político y social del estado de Guerrero, el empresario declaró: “Desde los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014, no hemos podido recuperarnos ni recobrar la confianza de la ciudadanía, del consumidor, de los vecinos, comunidades e incluso municipios vecinos, para que vengan hacer sus compras a Iguala. Todavía existe cierta desconfianza”.
Las cifras difundidas por el Gobierno de México, sin embargo, muestran que el monto de las Inversiones Extranjeras Directas (IED) entre enero y marzo de 2015 ascendió a US$7.573 millones, lo que equivale a 30% más de la cifra que se calculó para el mismo período de 2014. La mayoría de ellas, no fue por nuevas inversiones, sino por reinversión de utilidades.
Pero la imperante inseguridad afectó también con un fuerte coletazo a la minera belga Nyrstar NV, que decidió cerrar temporalmente sus instalaciones en Guerrero.
La empresa, que se dedica a la extracción de metales preciosos, informó en un comunicado que clausuraron sus actividades desde el 13 de noviembre de 2014 “debido a cuestiones relacionadas con la seguridad en la región”.
“Es una mina ubicada en la zona difícil de Guerrero, con un potencial muy importante, se estaba invirtiendo a un ritmo muy alto, de 200 millones de dólares por trimestre, para llegar al punto de producción. Trabajaba muy estrechamente con la comunidad, y los directivos trataron de mantener adelante su inversión”, dijo el Secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal sobre la mina, que empleaba a 380 trabajadores.
Un informe periodístico del medio local Revolución 3.0 informó que de octubre a diciembre de 2014 “50 por ciento de los negocios de la localidad [de Acapulco, Guerrero] tuvieron que cerrar sus puertas”.
Secuestran a directivo de PepsiCo
Otro de los hechos violentos, relacionados con la inseguridad que se vive en Guerrero, fue el secuestro del jefe administrativo Regional de PepsiCo, Hugo de la Cruz. El hecho ocurrió el miércoles 24 de junio, cuando iba en su auto, y un grupo de hombres armados y encapuchados lo interceptaron.
El empleado de la multinacional se encontraba en un auto de la firma, conducido por un chofer, cuando a solo dos kilómetros de salir de la ciudad de Teloloapan, fueron interceptados en la carretera por este grupo armado.
Luego de que estos delincuentes lo sacaron del vehículo se lo llevaron, y hasta las 18 hora local de la Cruz aún no había aparecido. Su chofer, que resultó ileso, alertó del hecho a las autoridades.
Finalmente, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Guerrero Comprometidos por el Bienestar, Fernando Meléndez Cortez, se apenó de la situación que vive su estado y dijo que en los pasados tres meses en Acapulco y Chilpancingo, dos municipios de esa localidad, cerraron 270 negocios, lo que además agrava la situación de desempleo local.