EnglishLa fuerza opositora de centroizquierda Coalición Cívica ARI (CC ARI) deunuciará hoy penalmente a la presidenta de Argentina Cristina Kirchner por la cancelación de la difusión de los datos oficiales de niveles de pobreza correspondientes al segundo semestre de 2013.
Los denunciantes alegan que la cancelación de la difusión de las cifras, que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) tenía programada para la semana pasada, se debe a que el gobierno de Kirchner intenta ocultar un aumento en los niveles de pobreza en Argentina, ocasionada por los altos niveles de inflación registrados durante el año pasado en el país.
Declarando para el diario La Nación, los dirigentes de CC ARI que firman la denuncia dijeron que “Los pobres en nuestro país son desaparecidos sociales, el Estado no los reconoce y ha decidido negarlos”.
La denuncia es el último episodio de una fuerte polémica que se desató desde que el INDEC anunciara el 23 de abril que no publicaría los datos ese día como estaba programado según el calendario oficial del organismo, publicado en su sitio web.
El organismo emitió un comunicado al día siguiente explicando que la cancelación se debió a que la metodología de elaboración del índice de precios al consumidor (IPC) fue modificada en enero de este año, lo que habría creado problemas técnicos en el cálculo de las cifras de pobreza que iban a ser publicadas.
Pero miembros de la oposición política y varios analistas económicos no gubernamentales aseveraron que los cambios en la metodología de la elaboración del IPC son irrelevantes para las cifras de pobreza del año pasado.
“Los problemas [técnicos] no pueden existir porque las que tienen que publicar son cifras del año pasado cuando el sistema aun era el mismo”, afirmó Gabriela Camaño, diputada nacional por el Frente Renovador.
La polémica se alimenta del fuerte contraste entre las cifras de pobreza publicadas por el INDEC correspondientes al primer semestre del 2013, según las cuales la pobreza alcanzó solo al 4% de la población durante ese período, y las estimaciones mucho más altas de los niveles actuales de pobreza publicadas por organizaciones no gubernamentales.
Así, según el Instituto Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP), que coordinan los economistas Claudio Lozano y Tomás Raffo, el 36,5% de los argentinos se encuentra actualmente sumido en la pobreza. El mismo instituto estima también que existen 5 millones de habitantes (el 12,1% de la población) que pasan hambre o están bajo la línea de indigencia.
Por su parte, ex funcionarios del INDEC estiman que 15,4 millones de personas viven hoy en situación de pobreza en Argentina.
En este contexto, la ex directora de Precios del Indec, Graciela Bevacqua, catalogó de “vergonzoso” la suspensión de la difusión de los datos. Para ella el tema de la pobreza y de la inflación “nunca ha sido un problema de metodología, es un problema de datos”.
Sin embargo, el jefe de Gabinete de Argentina, Jorge Capitanich subrayó durante una entrevista en el programa televisivo “6,7,8” que es “un absurdo” que los niveles de pobreza sean tan altos como lo indican las cifras no gubernamentales, y que “Mediante las políticas de Estado impulsadas [por el gobierno de Cristina Kirchner] se ha mejorado sustancialmente la calidad de vida de los argentinos”.
Capitanich estaría haciendo referencia a las cifras oficiales que muestran que la Argentina contaba con niveles de pobreza del 57,5% en octubre de 2002, durante la fuerte crisis económica por la que atravesaba el país en ese entonces.
Respecto a las declaraciones oficiales, Claudio Lozano del IPyPP dijo que “Pese a lo que reconozca o no la tinta oficial, el cuadro social argentino atraviesa por un ajuste que el Gobierno Nacional aceleró fuertemente este año a través de una devaluación de la moneda local a fines de enero, junto con el establecimiento de un techo que… pretende fijar salarios retrasados respecto de la inflación y con el aumento de las tasas de interés que frena la actividad económica. [Esto] exige realizar una ‘radiografía’ de la situación social que permita dimensionarla y caracterizarla, como insumo clave para llevar adelante las transformaciones necesarias que permitan superar los niveles de desigualdad y pauperización que atraviesa la población argentina”.
Los factores que inciden en la pobreza en Argentina
Le preguntamos a dos analistas económicos sobre las causas de la pobreza en el país sudamericano.
Según el economista Iván Carrino, de la Fundación Libertad y Progreso en Argentina, la pobreza responde a causas de corto y largo plazo. “La causa de largo plazo es que todavía no encontramos un modelo de crecimiento sostenible. Todos los gobiernos se enfocan en el corto plazo y dejan una bomba a punto de estallar para que intente resolverla próximo. Así es muy difícil que vengan inversiones que piensen de acá a 20 años”.
Carrino señaló a la inflación como la causa que más incide en la pobreza a corto plazo. Para él, “el gobierno aumentó acelerada y desordenadamente el gasto público para reactivar la economía y bajar el desempleo. Y lo logró, pero generando efectos secundarios negativos: Argentina tiene una de las tasas de inflación más altas del mundo y no todos los ingresos pueden crecer por encima de ella. Como consecuencia, mucha gente queda desplazada y eso es lo que lamentablemente vemos en los índices confiables de pobreza. Creo que ha sido el peor error de este gobierno, su daño más profundo”.
Por su parte, Iván Cachanosky, de la misma organización, agrega que la pobreza en el país de la soja y el vino se debe (además de a la inflación) a la mala administración de los planes sociales. “La función de los planes sociales es lograr que las personas que aun no han podido insertarse en el mercado laboral, puedan hacerlo. Paradójicamente (aunque muy común en Argentina), no es lo que ocurre en el país. Los planes sociales son cada vez más y a su vez más extendidos en el tiempo y no se ve ningún tipo de movilidad social. El principal problema son los incentivos”.
Concluye dando un ejemplo para explicar como inciden los incentivos en el problema. “La Asignación Universal por Hijo (beneficio que le corresponde a los hijos de las personas desocupadas), del monto que se otorga, los familiares reciben el 80% incondicionalmente, y solo el 20% extra si cumplen con las condiciones de educación y sanitarias. Francamente, no parece un incentivo suficiente para que los chicos terminen el secundario y las estadísticas muestran eso, cada vez menos alumnos finalizando el secundario. Esto empobrece a la población, ya que una persona sin secundario completo difícilmente logre insertarse en el mercado laboral, que es lo que genera movilidad social. Lo único que han logrado los planes sociales en Argentina es evitar la movilidad social de las personas que más necesitan ingresar al mercado laboral”.