EnglishLos resultados que acaba de dar a conocer la reciente encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) – sin duda la de mayor prestigio en Chile— demuestran que la presidente Michelle Bachelet es la figura política mejor evaluada, con un 63% de aprobación y un 12% de rechazo.
No obstante, la forma en que el Gobierno se está conduciendo es aprobada en un 50%, versus un 29% que la rechaza y opina que las medidas propuestas en su programa cada vez están siendo más cuestionadas por la ciudadanía.
¿Qué explica esta diferencia? ¿Por qué Bachelet, pese a todos los errores que está cometiendo, es “querida por los chilenos”?
Sencillamente porque haga lo que haga, diga lo que diga o esté ausente de los problemas diarios, ella es vista como “la madre que nos protege”. Con toda la ambigüedad que esta afirmación pueda tener.
Sin duda, el chileno promedio se identifica en su persona y su historia. Su simpatía seduce, constituyendo su principal capital político. La “queremos” porque representa a la mamá, y a las madres las amamos con sus virtudes y defectos. ¿Quién no cree que la suya es la mejor y más bonita madre del mundo?
El mejor evaluado después de la presidente es Andrés Velasco, el exministro de Hacienda del primer Gobierno de Bachelet y excandidato presidencial, con un 46% de aceptación y 16% de desaprobación. Interesante fenómeno, porque al igual que lo que ocurre con el candidato conservador Manuel José Ossandón, tiene un apoyo que va más allá de su sector.
A Velasco le sigue el eterno candidato progresista Marco Enríquez-Ominami e irrumpe en la escena Isabel Allende, hija del expresidente socialista Salvador Allende y actual presidente del Senado, con un 45% de aprobación y 20% de rechazo.
La novedad ha sido que, la mundialmente conocida exlíder estudiantil y actual diputada del Partido Comunista Camila Vallejos es la figura con mayor rechazo, alcanzando el 44% de desaprobación.
¿Qué ocurre mientras tanto en el campo conservador?
El expresidente Sebastián Piñera sigue siendo el líder del sector con un 38% de aprobación y un 27% que lo desaprueba. Su Gobierno es visto positivamente en un 37%, mientras que un 35% lo hace negativamente.
Sin embargo, no hay que olvidar que el exmandatario, pese a recién haber dejado el Gobierno se ha mantenido permanentemente expuesto, y sus seguidores más cercanos están encargados de alimentar su campaña para intentar regresar en 2018.
Lo que sí resulta muy interesante es el grado de aprobación que tiene el reciente electo senador por Santiago Oriente Manuel José Ossandón, quien llegó al Parlamento tras una exitosa gestión como Alcalde de Puente Alto, uno de los municipios más populares del Gran Santiago.
Ossandón fue muy crítico del Gobierno de Piñera, lo cual le generó anticuerpos en algunos sectores de la Alianza, pero también simpatías fuera de ella. Es el político conservador mejor evaluado, ya que tiene el mismo 38% de aprobación que Piñera, pero su rechazo es mucho menor: 19%.
No hay que olvidar que en las elecciones parlamentarias más del 60% de quienes votaron por Bachelet lo hicieron también por Ossandón, lo cual le da un voto cruzado.
Más atrás viene el exprecandidato Andrés Allamand, en tanto que la excandidata Evelyn Matthei no aparece en la encuesta.
En síntesis, apenas transcurridos seis meses del segundo Gobierno de Bachelet, y aunque todos digan que es muy pronto, ya se está desatando la próxima carrera presidencial.
Tal vez en nuestro fuero más íntimo, los 4 años que dura el mandato presidencial, y que pueden parecer muy cortos, están sintiéndose demasiado largos. Pareciera ser que la Nueva Mayoría viene gobernando hace rato, que fue un pacto electoral y que se irá desgastando sin mayor proyección, en tanto que la oposición conservadora aún no encuentra su destino.