La recesión y el déficit fiscal por aumento del gasto público, por una parte, y la caída del ingreso, por otro, tienen en vilo la credibilidad de la economía colombiana.
Ayer, Moody’s Investors Services redujo la perspectiva de su calificación de “estable” a “negativa”. Con esta decisión, la calificadora se suma a las decisiones tomadas por Fitch y S&P Global Ratings. La firma expresó que dicho cambio obedece a los riesgos económicos y fiscales por el COVID, que pueden dejar una huella duradera en la fortaleza fiscal y el perfil crediticio de Colombia.
Según indicó Moody´s “la disminución de los ingresos del Gobierno afectará la exequibilidad de la deuda, ya que la relación interés-ingresos aumentará al 13 % en 2020 desde el 10,8 % en 2019, una vez más por encima de la mediana del 7,8 % de los países con calificación ‘Baa’”
“En ausencia de una consolidación fiscal importante, es poco probable que las métricas de deuda pública mejoren a mediano plazo, lo que se traduce en un perfil fiscal más débil que el de sus pares calificados con Baa2”.
Más para el Estado, menos para los ciudadanos
Todas las calificadoras han coincidido en algo, y es que el gobierno debe adelantar una reforma fiscal. Mientras los trabajadores independientes y los empresarios buscan cómo sobrevivir, el Estado busca aumentar el grado de expropiación vía impuestos.
Durante la crisis económica que vive el país no se redujo ningún beneficio para sus burócratas. No importa la ideología de los políticos (izquierda o derecha), todos siguieron devengando cuantiosos salarios, viáticos, asesores, carros blindados, conductores y esquemas de seguridad.
Al parecer, el gobierno prefiere aumentar la presión impositiva antes que quitar privilegios a los burócratas, que son pagados con el trabajo de los ciudadanos.
Proyecciones de MinHacienda
Las cuentas que hace el Ministerio de Hacienda son bastante desalentadoras. La entidad, al actualizar sus proyecciones, afirmó que el PIB de Colombia caerá un 6,8 % este año (antes la estimación era de 5,5%). El ministerio también informó que el déficit fiscal ascenderá a un 8,9 % del PIB, cuando inicialmente se esperaba que rondara el 8,2 %.
“La disminución de los ingresos del Gobierno afectará la asequibilidad de la deuda, ya que la relación entre interés e ingresos aumentará al 13 % en 2020 desde el 10,8 % en 2019, una vez más por encima de la mediana del 7,8 % de los países que tienen la misma calificación de Colombia”, explicó MinHacienda.